La ciudad de As Burgas cuenta con 429 establecimientos de hostelería
18 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Históricamente, el bar ha sido el principal centro de reuniones y punto de encuentro de los pueblos y ciudades. Y aunque la crisis hizo mella en el sector de la hostelería, lo cierto es que Ourense parece seguir siendo una provincia propicia para este tipo de negocios, que conforman la identidad de los lugares a los que pertenecen. Al menos, lo es la capital, que abandera el ránking gallego en cuanto a número de bares por habitante. Con 429 establecimientos, la ciudad tiene una media de cuatro locales por cada mil habitantes, un registro al que no llegan Pontevedra, A Coruña o Lugo. Solo está a la altura de la ciudad de As Burgas, en tema de bares, la capital gallega. Santiago tiene la misma media de locales por habitante, cuatro, si bien la cifra total se queda en los 393.
A esa alta cifra de locales abiertos en Ourense no es ajena, seguramente, la enorme concentración de establecimientos que tiene la capital en apenas tres o cuatro calles. La zona de vinos hace honor a su nombre y en ella se concentran varias decenas de establecimientos en los que se combina bebida y comida.
Y no solo la capital es un referente para el sector. Las principales cabeceras de comarca también dan la talla en este negocio. Prueba de ello es lo que ocurre en O Carballiño, que tiene abiertos al público un total de 62 bares, una cifra que sitúa la media por cada mil habitantes en 4,46. Importante es también el dinamismo que aportan a la vida social de Verín sus 58 establecimientos. En esa localidad tocan a 4,13 bares por cada mil personas.
Supervivientes a la crisis
Los datos fueron recogidos a finales del año pasado por la Federación Española de Hostelería y forman parte de la campaña Benditos Bares, que acaba de reeditar Coca Cola. En esa estadística se recoge también lo distinta que es, respecto a la capital y las principales villas, la situación en las zonas menos pobladas de la provincia de Ourense. Al igual que ha ocurrido en muchas otras comunidades, en los últimos años los pueblos se han ido quedando sin gente y muchos negocios han ido cerrando, aunque el bar ha sobrevivido a locales como peluquerías o tiendas, convirtiéndose así en el único punto local de encuentro.
Y aunque hay excepciones como la de A Gudiña, donde la media de bares por cada mil habitantes es de cinco, lo cierto es que la mayor parte de los pueblos de menos de mil quinientos habitantes ya solo cuentan con uno o dos locales que subsisten gracias a la visita diaria de los vecinos. Si la despoblación persiste, se enfrentan a un futuro incierto.
En España la cifra de bares alcanza en la actualidad los 101.397 negocios.