El COB al play off con sabor agridulce

La Voz

OURENSE

El COB disputó el primer partido en el Paco Paz
El COB disputó el primer partido en el Paco Paz MIGUEL VILLAR

Los ourensanos cayeron en Lleida (78-66) tras un pésimo último cuarto

21 abr 2017 . Actualizado a las 23:30 h.

Clasificación para los play off de ascenso a la ACB por tercera temporada consecutiva con sabor agridulce para el COB tras una dolorosa e incomprensible derrota en Lleida por la forma en que se produjo, tras un parcial de 21-2 en los primeros siete minutos del último cuarto y después de que el equipo de Gonzalo García de Vitoria llevase controlado el partido con ventajas cómodas en el marcador, pero acabó pidiendo la hora y jugando a no perder por 16 puntos, que era la renta con la que ganó en el Pazo a los ilerdenses y que le vale tener el average particular ganado para no tener que esperar a la última jornada para certificar la clasificación.

Pero las sensaciones globales que dejó el equipo y el partido son malas. Y eso que el “affaire Guerra” se cerró de la mejor forma posible, jugando titular de inicio y con la actitud necesaria por el jugador, su habitual protagonismo en ataque y hasta un ataque de liderazgo en muchos momentos de juego que no son tan frecuentes en él. La buena defensa de inicio bastó para que Lleida comenzase a naufragar en sus propios errores en el tiro, con porcentajes paupérrimos y el COB logró rentas de hasta 8 puntos (8-16), que no fue capaz de aumentar ni mantener por el grave problema que tuvo en el rebote defensivo, donde concedió multitud de segundas opciones de tiro a los de Borja Comenge y porque se contagió de los malos porcentajes ilerdenses. Baste el dato que hasta el descanso ambos equipos se movieron un 30% de acierto en el tiro de dos y tres puntos y los cobistas lo redondearon con su déficit en los tiros libres. Pero a pesar de todo, con la aparición con dos triples de Kapelan, llegó al descanso con ventaja (28-31) y el partido controlado.

Lleida tenía que quemar sus naves, pero el COB salió enchufado en el tercer cuarto y aprovechó que el desacierto local iba en aumento para con un parcial de 2-8 en los primeros cinco minutos del cuarto, abrir la máxima ventaja a su favor (30-39), donde Wright, tras las tres faltas de Guerra, se erigía como la única referencia ofensiva del equipo. Ahí comenzó un ocaso de difícil explicación. Christian Díaz comenzó su carrusel de pérdidas de balón y el equipo perdió el norte como lo hizo su principal líder en pista, su base. Sin referencias anotadores exteriores y con Guerra sentado en el banquillo, Lleida creció de la mano del trabajo colectivo en defensa, que alternó con una zona que nunca supo atacar el COB y con Martí, Feliu y Sevillano como ejecutores en ataque. Pero los cobistas llegaron con ventaja al último cuarto (44-47) y ahí ofrecieron siete de los peores minutos de la temporada donde no tuvieron intensidad defensiva, regalaron numerosas pérdidas de balón al rival y recibieron un parcial demoledor de 21-2 con el consumieron la ventaja con la que llegaron al partido (65-49). Por suerte aparecieron Guerra, seguro en los tiros libres finales y dos triples de Kapelan para salvar el average sufriendo hasta los segundos finales y sellando un objetivo con el nadie soñaba a principio de temporada, pero que nadie pensó poder conseguirlo de una forma tan gris como se consiguió al final.