Siempre he pensado que la naturaleza es un libro magnífico de aprendizaje y siempre tuve la idea de que cuando fuera profesor estaría con los jóvenes pateando la ciudad y la provincia. Todo lo que pudiera. Voz Natura ya forma parte no solo de mi familia sino que está implicada en mi forma de dar las clases. Soy profesor de Sociales y en mi programación y ejes transversales educativos siempre está presente. Durante estos años he notado que en los chicos ha nacido una conciencia solidaria. Ciudadanos comprometidos a los que les gusta la naturaleza. Tenemos un grupo que sabe convivir, respetar... Además en este colegio, Franciscanas, con su espíritu del amor por el medio ambiente, es una lección extraordinaria la que han aprendido a lo largo de estos años. Hemos realizado acciones de recogida de tapones con fines solidarios, reciclamos bolígrafos, en la bicicleta hemos detectado vertederos clandestinos todos los años y los hemos denunciado, limpiamos ríos, erradicamos especies foráneas y realizamos plantaciones, vamos a exposiciones sobre medio ambiente... Faltarían horas para contar todo. A día de hoy, este curso, llevamos 37 actividades. El mérito está también en que muchas de las actividades las hacemos fuera del horario escolar y que muchos profesores colaboran y los chicos se apuntan. Siempre tenemos un grupo de cincuenta chicos que participa activamente. Siempre digo que mientras exista el programa Voz Natura y no me jubilé, yo estaré ahí. Es fabuloso. Aunque no se trata de una competición, cuando me comunicaron el premio sentí estar flotando en una nube. Cuando pasó tiempo lo vi como un reconocimiento a todo el trabajo. Estoy muy orgulloso de los chicos y así ves que todo lo que has hecho tiene un sentido.