Un único mando coordinará las emergencias graves en los límites con Castilla y Portugal

La unificación en un solo mando de la jefatura de actuación en urgencias o emergencias graves y la definición estricta de protocolos de actuación  y coordinación ante desapariciones o percances graves serán dos de las consecuencias del denominado plan transfronterizo Ariem, del que se beneficiarán 111 municipios gallegos (de las provincias de Pontevedra y Ourense), portugueses (toda la franja norte) y castellano-leoneses (de Zamora y Salamanca).

El nuevo programa Ariem Plus tendrá vigencia hasta el 2020, después de la «positiva» experiencia en eficacia en salvamentos y emergencias como incendios forestales que deparó la primera fase, el Ariem 112, que concluye estos días tras una inversión global en cinco años de casi 2,8 millones de euros. El nuevo ciclo del programa tendrá una dimensión mayor. La dotación económica prevista se elevará hasta casi los seis millones de euros en los próximos cuatro años, con la participación del Plan Feder, la Xunta, la Comunidad de Castilla-León y la Guardia Nacional Republicana (GNR), entre otros organismos.

La primera fase de este programa fue premiada por la Unión Europea como la mejor iniciativa transfronteriza en materia de seguridad y emergencias y como tal recibirá un galardón el próximo mes en Praga.

Dos drones

La mayor parte del dinero se irá para dotación en nuevos medios materiales. 

El Ariem 112 culminó con un acto celebrado ayer en la sede de la Eurocidade Verín-Chaves con la entrega de material. El GES de Lobios recibió un vehículo pick up, un equipo de excarcelación, cinco equipos respiración, y otro material; el de Muiños recogió una embarcación, cinco equipos de respiración y otro material; y el de A Gudiña, cinco equipos respiración y otro material. El concello de Vilardevós recogió un remolque y una pick up para su agrupación de voluntarios de Protección Civil, mientras que el grupo de Vilar de Barrio tendrá un nuevo remolque.

El consorcio contraincendios de Verín recibió 20 equipos respiración, una cámara térmica, una embarcación, 365 racores, 4425 detectores de fume, cuatro cojines neumáticos, tres trajes químicos, una ducha descontaminación, tres carros de aire,  175 garrafas de espumógeno, 3 medidores de gas e 52 cascos de bombero. También le fue entregado material al Concello de Laza, para su grupo de emergencias (que en breve se convertirá en GES).

«A cooperación transfronteiriza é moi útil. Os que estamos aos dous lados do que antes era a raia entendemos que esa axuda e entendemento común dá froitos», destacó el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, en el acto de entrega del material. Rueda también destacó la especial sensibilidad de la Unión Europea con este tipo de programas transnacionales y recordó que el Norte de Portugal y España comparten una gran superficie de frontera. El vicepresidente apostó por obtener fondos e inversiones aprovechando esa circunstancia.

«Esta iniciativa salva vidas e permite coordinar medios», apuntó por su parte el alcalde de Verín, Gerardo Seoane.

La homogeneización de materiales entre todos los cuerpos de seguridad y emergencias a ambos lados de la frontera fue destacada por el director xeral de Emergencias, Luis Menor, como una de las grandes ventajas del primer Ariem. 

Evitar la descoordinación

Una de las claves del nuevo programa es evitar casos como el de un parapentista ourensano accidentado hace dos años en la Serra do Larouco, en el lado portugués. Las complicaciones burocráticas provocaron que el herido pasara por cinco hospitales de ambos lados de la raia hasta que se definiera dónde era definitivamente atendido, para acabar su recuperación en el CHUO. 

Fue el típico ejemplo al que aludió ayer Luis Menor para asegurar: «No ámbito das emerxencias ou percances graves nós dicimos que sempre xogamos a empatar, nunca a gañar. Sempre hai algo que pode complicarse ou saír mal. Este plan será determinante para evitar este tipo de situacións».

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