El ourensano José Martínez Bugallo será este año el coordinadore de los 58 motoristas del despliegue
19 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Once guardia civiles gallegos partieron ayer rumbo a Madrid con una moto, un par de maletas y unos cuantos uniformes limpios como equipaje. El destino final es Málaga donde se reunirán con el resto de integrantes del Servicio de Movilidad y Seguridad Vial de la Vuelta Ciclista a España 2015, sumando un total de cincuenta y ocho motoristas. Ellos serán los encargados de acompañar y proteger a los participantes durante la competición, previniendo posibles accidentes.
El encargado de coordinar estas actividades será el ourensano José Martínez Bugallo, tarea que le corresponde por ser el sargento con mayor antigüedad en esta operación. «Al ser mi tercer año, me corresponde coordinar un poco el servicio de los cincuenta y ocho motoristas», asegura. Todos los miembros del servicio se presentan voluntariamente para llevar a cabo esta tarea, aunque primero deben demostrar sus habilidades. «Todos debemos superar cuatro pruebas: una de conos, un circuito, otra prueba teórica sobre las normas de la vuelta ciclista y una entrevista con el comandante de seguridad vial», declara el general.
A partir del sábado, día en el que arranca la vuelta, los guardias se enfrentarán a 3.357 kilómetros de carretera, divididos en veintiuna etapas. «Al pasar tanto tiempo juntos, entre los guardias nacen buenas amistades. Hasta organizamos comidas y encuentros con los que ya no van», asegura José Bugallo. Y es que la carretera une, así como el trabajo en equipo. «Cada uno tiene su función. Están los bandera amarilla que cortan el tráfico, los bandera roja que dan protección a la zona, los abre-carrera que se encargan de la seguridad directa de los ciclistas y detrás viene un pelotón de reserva», explica.
Durante la vuelta los motoristas se levantarán todos los días a las siete de la mañana para revisar el estado de los vehículos, repostar y alimentarse. Deben llegar un par de horas antes que los ciclistas a la zona de salida, asegurándose que todo esté correcto. Cuando la carrera comience, protegerán a los participantes hasta la siguiente etapa, donde descansarán hasta el siguiente día. Un viaje intenso que da para hacer apuestas. «A falta de Alberto Contador, mi favorito es Nairo Quintana», confesó el ourensano.