El temporal de agua inundó varias calles y carreteras de O Barco y Vilamartín

María Cobas Vázquez
MARÍA COBAS O BARCO

VILAMARTÍN DE VALDEORRAS

LOLITA VÁZQUEZ

El temporal se cerró también con varios árboles caídos, que llegaron a cortar varios viales al paso de vehículos

31 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El temporal de viento y lluvia dejó varias incidencias en la red viaria de Valdeorras. La más frecuente, la producida por la presencia de agua en calles y carreteras. Desde media mañana, en Vilamartín estuvo cortado al tráfico el vial que discurre paralelo al río Leira en su tramo final antes de desembocar en el Sil. El agua bajaba con tal magnitud que el cauce no era capaz de absorberla, lo que provocó que el río desbordase y acabase inundando la carretera de lado a lado, cortándola por completo y haciendo inviable el paso de vehículos. Al agua de la lluvia se unía la procedente del deshielo en las montañas, lo que se tradujo en unos ríos cada vez más crecidos de caudal que en algunos puntos se vieron insuficientes. Unos conos que el viento pronto derribó y una cinta alertaban de la incidencia a los conductores.

La de Vilamartín no fue la única vía cortada al tráfico. En O Barco, el vial de acceso a Vilariño también quedó cerrado. Fue por la tarde, y en este caso por la caída de un árbol, que atravesó la carretera de tal forma que era imposible seguir el camino. Se encargó de su retirada el Grupo de Emergencias Supramunicipales. El GES fue llamado también para retirar otros dos árboles derribados en la carretera a Sobradelo (en Carballeda de Valdeorras).

El agua fue un problema en varios puntos de la carretera de acceso a O Serro (en O Barco), donde el colapso provocó el reborde de alcantarillas en varios puntos del trazado. Precisamente un atasco en la red de alcantarillado se aventuraba como causa de la inundación que poco después de las siete de la tarde había en la avenida del Bierzo. Una de las tres entradas al casco urbano barquense vio ralentizado el tráfico debido a la gran cantidad de agua que salía a borbotones de varias alcantarillas y que seguía su camino calle abajo favorecida por la gran pendiente que hay en esa calle. Los operarios del Consorcio Comarcal de Aguas de Valdeorras trabajaban en la búsqueda del origen y la solución de la incidencia.