La carretera de San Vicente continúa hundiéndose y aparecen nuevas grietas

María Cobas Vázquez
María Cobas O BARCO

OURENSE

La carretera de San Vicente ha vuelto a hundirse
La carretera de San Vicente ha vuelto a hundirse LOLITA VÁZQUEZ

Empleados de Cavima defienden que los repises demuestran que no solo la cantera afecta a la estabilidad de la carretera

19 nov 2014 . Actualizado a las 04:55 h.

La carretera de San Vicente (en Vilamartín de Valdeorras) continúa hundiéndose pese al cierre de la actividad extractiva en la cantera de Cavima. El repise del terreno dejó en el trazado bajadas de más de veinte centímetros en algunos puntos, lo que ayer la hizo impracticable al paso de turismos. Y, de nuevo, provocó protestas de los empleados de la pizarrera, que defienden que lo sucedido en el vial en los últimos días ratifica que no es únicamente por acción de la cantera que la OU-807 se vaya abajo. Por eso, durante todo el día estuvieron concentrados en la carretera, impidiendo que se pudiesen rellenar los baches para facilitar el paso de vehículos.

A primera hora, varios camiones de Pizarras Gallegas llegaron a la carretera llenos de escombro para rellenar los repises. Pero únicamente uno de los vehículos pudo descargar, sin tener oportunidad de poder estirar los descartes y reafirmar así el terreno. Los trabajadores de Cavima se lo impidieron. Defendían que el paso de vehículos de gran tonelaje a diario también influye en el desplome del vial, que cada vez muestra una peor cara a los conductores.

Todo sucedió en un escenario que, un día más, estuvo marcado por la fuerte presencia policial. Varias patrullas de la Guardia Civil estuvieron en la zona para evitar enfrentamientos entre los trabajadores de las dos canteras, así como entre los empleados de Cavima y los vecinos de San Vicente. Los únicos que hubo fueron de carácter verbal. Uno de ellos, poco después de la una del mediodía, cuando una mujer que se dirigía a San Vicente no pudo pasar y, tras bajarse del vehículo, recriminó a los empleados de Cavima su actitud, para después acusarles de ser los causantes de todo lo que sucede al vial. Hubo quien respondió para remarcar que quien había cerrado la carretera vertiendo una montaña de pizarra en medio había sido la otra cantera.

A última hora de la tarde, los camiones de Pizarras Gallegas regresaron a la carretera para tratar de acondicionarla, según los datos del portavoz vecinal, Leopoldo Nogueira. Seguirán hoy. Por su parte, los trabajadores de Cavima van a Santiago para protestar ante la Xunta.