Ourense registra tres asaltos en un radio de 25 kilómetros en una samana
28 oct 2014 . Actualizado a las 05:25 h.Algunos ladrones que actúan en la comarca de Monterrei parecen haber puesto el punto de mira en las farmacias de la zona. Si hubo épocas en los que estos negocios eran objeto con bastante frecuencia de todo tipo de robos, estos hechos parecían haber disminuido en los últimos tiempos. Pero los tres asaltos ocurridos en la última semana en establecimientos de Verín, Oímbra y Laza, en un radio de unos 25 kilómetros, han traído la preocupación a los farmacéuticos y empleados de farmacia de la comarca. «Nos han llamado otros dueños de farmacias diciendo que están asustados», corrobora Julia Carrera Diéguez, copropietaria de la farmacia de Laza, asaltada la noche del pasado domingo.
«Estamos aliviados de no haber estado en casa ni en la farmacia», explica esta víctima del robo, en el que los autores entraron por la ventana del primer piso de la vivienda y desde ella accedieron a la farmacia, en el bajo. Por el camino, el autor se encontró una valiosa sortija de compromiso. En la farmacia, consiguieron dos mil euros.
En los tres casos, el modo de actuación de los delincuentes fue diferente. En este último se trató de un robo con fuerza, en el anterior en Oímbra entraron en la farmacia destrozando su puerta de cristal con un coche y en el primero, en la calle Luis Espada de Verín, fue en el único que el atracador empleó la intimidación, utilizando un cuchillo para amenazar a las empleadas. La Guardia Civil siguió una línea de investigación que les llevó hasta un sospechoso condenado por otro atraco anterior. En el caso de las farmacias de Laza y Oímbra, ambos negocios contaban con alarmas y se espera que las imágenes grabadas por las cámaras en el interior de la última farmacia asaltada aporten valiosa información a los investigadores. En ellas se ve bastante bien al posible autor del robo en Laza, aunque no se descarta que este tuviera un cómplice.
En Laza han tenido que lamentar la pérdida económica y el susto de ver su negocio y vivienda invadidos por intrusos, pero en la farmacia de Oímbra todavía están reponiéndose de los daños materiales que les causó el aparatoso método de robo de los autores. Empotraron un coche contra la fachada del negocio, que todavía tiene la entrada afectada. «Estamos desconcertados y todavía no hemos podido hacer una reflexión. Por ahora, pensamos en plano egoísta, porque nos hemos quedado sin puerta y nos hemos quedado perdidos los días siguientes», explica la mujer de Vicenzo Fernández, el propietario. «¿Estará de moda robar en las farmacias?», se pregunta y calcula que por el botín no compensa el riesgo a los ladrones. De Oímbra se llevaron 400 euros. De Verín, en el robo con violencia, unos mil y de Laza, dos mil euros más el anillo.