Reivindicó Antonio Piña que la Audiencia Provincial «debe encarnar los valores de independencia y honestidad con los que se identifica a la justicia». Con unas relaciones institucionales que definió en casi todos los casos como fluida, el futuro presidente de este órgano reclamó la necesidad de un nuevo juzgado de lo penal «y ante la coyuntura actual de no creación, interesaremos del presidente del TSXG el mantenimiento del actual sistema de apoyo». No dejó de calificar como «preocupante» la situación del Juzgado de lo Penal 2, con pendencias en la ejecución cercanas a 2.000 asuntos.
Con una buena situación de los órganos judiciales unipersonales y un nivel de respuesta que no pasa de seis meses, afirmó, la tasa de congestión y pendencia no alcanza el 2 %, si bien apuntó que en el caso de los juzgados de familia y mercantil se empiezan a ver «signos de congestión». La modificación del reparto, limitando los asuntos a los de su especialización, sería probablemente suficientes, según Piña.
En el apartado de la atención al ciudadano, el aspirante a presidente de la Audiencia apunta la necesidad de puntualidad en las horas de las vistas.