Las de la Tecnópole cerraron anteayer y las de Oira y Monterrei, el día 7
02 sep 2014 . Actualizado a las 11:52 h.Ourense está alerta amarilla por altas temperaturas. Para hoy se espera que los termómetros lleguen a los 37 grados y desde Meteogalicia apuntan que la comunidad seguirá bajo la influencia anticiclónica como mínimo hasta el próximo día 10. Sin embargo, este domingo el entorno de la capital ourensana se quedará sin sus principales piscinas públicas. Una, la del Parque Tecnolóxico de Galicia, ya cerró anteayer y las otras dos, la de Oira y de Monterrei, lo harán el día 7.
En todos los casos son instalaciones de titularidad pública y todas las administraciones coinciden en externalizar la gestión de sus respectivas piscinas, de modo que las fechas de servicio se marcan antes de comenzar el verano, cuando se adjudica la concesión. Al finalizar el contrato, la empresa seleccionada cierra las instalaciones a menos que la institución propietaria negocie para prorrogar su apertura. Así ocurrió, por ejemplo, el año pasado en el complejo de la Tecnópole, que es de la Diputación ourensana y que entonces se mantuvo abierto hasta el día 15 de septiembre. En esta ocasión, fue el 31 de agosto porque el director de las instalaciones, Ángel Cid, que también lo es del Pazo dos Deportes Paco Paz, no recibió ninguna orden al respecto, apunta.
Cid explica que el contrato de la empresa que gestiona las piscinas se terminó, como ocurrirá el próximo domingo con el de la firma que lleva las instalaciones del complejo de Monterrei, de la Xunta. «Antes se hacía del 15 de junio al 15 de septiembre, pero resulta que en septiembre notábamos siempre un bajón y decidimos cerrar antes pero aprovechar para abrir más pronto, en junio, cuando los días son más largos», indica el jefe del servicio de Deportes de la Xunta en Ourense, Mario Guede, que también hace referencia al inicio del curso escolar en las próximas fechas.
Por lo que respecta a las piscinas de Oira, desde el gabinete de prensa del gobierno también aluden al comienzo de las clases, que reduce la afluencia, y a la finalización del contrato firmado con la concesionaria de las instalaciones, que habría de ser prorrogado para mantenerlas abiertas, algo improbable por ahora.