El cierre de la residencia universitaria anima el mercado inmobiliario
02 sep 2014 . Actualizado a las 07:20 h.El cierre de la residencia universitaria ubicada en el campus de Ourense deja a la provincia con una única oferta, la del Concello de Allariz, y con un panorama más halagüeño para las agencias inmobiliarias y los propietarios de pisos que desean alquilar a estudiantes. El mercado ha estado animado este verano y la Universidad ha tratado de paliar los efectos del cierre con 35 becas y una bolsa informativa que incluye ofertas de particulares.
La media de pisos incluidos en esta novedosa bolsa de alquiler rondó durante todo el verano los 40 inmuebles. Se trata de que los alumnos del campus puedan acceder -con una clave que restringe la intromisión de inmobiliarias- a pisos cuyos propietarios desean alquilar a estudiantes.
La satisfactoria experiencia del año pasado en el campus de Vigo animó a ampliar la prestación a Ourense y Pontevedra. En total, la Universidad incluyó en su web unas 475 ofertas, de las que algo menos de un 10% corresponden a Ourense.
La modalidad de alquiler, como en el mercado tradicional, es por habitaciones o por piso completo. En el primer caso los precios pueden oscilar entre los 120 euros en la avenida de Buenos Aires y los 180 de un piso en el centro. En viviendas completas, la bolsa de alquiler del campus incluye, como ejemplos extremos, una oferta de 300 euros en la calle Doctor Fleming y otra de 500 en la rúa Nova.
Esta bolsa virtual, explican desde la Sección de información, orientación y promoción del estudiante (Siope) de la Universidad, «funciona solo a modo de tablón de anuncios. En caso de que se produzca algún problema, la Universidad no se hace responsable pero el alumno puede alegar y presentar una petición para que se retire ese piso en base a su experiencia».
El verano inmobiliario se ha volcado con el campus. En la agencia JBA, José Bailón advierte un importante incremento de la demanda de pisos para universitarios y lo achaca al cierre de la residencia. En algún momento del verano, explica, «quedámonos sen propiedades na zona da universidade».
José Antonio Francisco, de la inmobiliaria Galvén, resalta una demanda en alza y una reducción de la oferta, «talvez porque a moitos propietarios non lles convence o de alugar só por dez meses. Nese aspecto hai opcións como alugar todo o ano e no verán pagar só os gastos mínimos; iso depende dos propietarios».
El mercado inmobiliario universitario no se ciñe solo a estudiantes. «As Lagoas está enfocado case todo á universidade -recalca Bailón-. O que é moi bo vai encamiñado a profesores e o que está algo máis trallado, a estudantes».
El prototipo de piso para alumnos es de tres o cuatro dormitorios, sin lujos, sin garaje y, en muchos casos, sin ascensor. Sobre todo, matizan desde Galvén Inmobiliaria, «porque nas Lagoas, se falamos de vivendas novas, temos que pensar por encima dos 450 euros máis a comunidade e iso supera os presupostos dos rapaces». Bailón recuerda que «hoxe os estudantes tamén son esixentes. Os pisos zarrapastrosos quedan para o final de todo».