El campo José Arjiz acogió ayer el partido que enfrentó al Verín CF y al Monterrei CF. Un amistoso, en plenas fiestas de la patrona, en el que el equipo de Iván González se presentaba por primera vez ante su público. Pero el encuentro era mucho más que un enfrentamiento entre dos escuadras que, por aquello de la proximidad geográfica y la rivalidad entre vecinos, atrae la atención de los aficionados. Era una oportunidad para darle un nuevo empujón a la campaña «Tu sonrisa mueve mi corazón» con la que los padres de Valeria de Dios buscan fondos para seguir dando a su hija el tratamiento que necesita para paliar los efectos de su enfermedad. Una oportunidad que el club verinense, su rival y el árbitro Aitor Cid, que acudió a dirigir la contienda de forma completamente gratuita, no quisieron dejar pasar.
Valeria tiene cuatro años y padece ataxia cerebelosa no filiada. Ayer unas 400 personas pasaron por taquilla para comprar la entrada que se destinaba íntegra a ayudar a esta familia. Los cinco euros no solo daban acceso al campo sino a un sorteo en el que hubo balones oficiales del mundial y prendas de la equipación del Barça. Estas últimas, cedidas por Juan, un vecino de Tintores que trabaja con las categorías base del equipo culé y que también cedió un fin de semana para dos personas regalado por sus compañeros del club. El encuentro finalizó con el resultado de 2-2 , pero ni el marcador ni los lances del juego fueron protagonistas de una tarde que se inició con Valeria y su hermano Hugo, haciendo el saque de honor.