Viaje idílico con metas orientales

alejandro tesouro / r. n. OURENSE / LA VOZ

OURENSE

CEDIDA

La pareja se fue para incrementar su formación y buscar oportunidades

05 ago 2014 . Actualizado a las 10:50 h.

No hay mejor publicidad que el boca a boca. «Unos amigos fueron los que me hablaron de la organización Aiesec, que ayuda a titulados a hacer prácticas en el extranjero», comenta Lino Díaz. «Estuve viviendo en Tapei gracias a un intercambio de la Universidad de Vigo y pude visitar a mi novio Lino durante 10 días en Kuala Lumpur, y me pareció una buena idea venirme para aquí al acabar la carrera», añade Alba Blanco.

Así se escribe la historia en Malasia de esta pareja ourensana. Viven en su mayor ciudad, un núcleo urbano que muestra mucha diversidad cultural y en la que te puedes encontrar malayos musulmanes con sus hábitos castizos. «Por ejemplo las mujeres llevan velos, o toparte con la comunidad china mucho más moderna con vestimentas atrevidas», indica Lino.

«Encontré una muy buena oportunidad en Malasia. Llegue en mayo de 2013 y no me costó mucho adaptarme», asegura Lino que trabaja de informático. Vive a cinco minutos de su oficina y en una zona atractiva. Además, señala que en su compañía trabajan más compañeros extranjeros por lo que hizo rápidamente amistades. Por otro lado, Alba quiere seguir aumentando su formación profesional: «Ahora estoy estudiando chino mandarín y quiero seguir avanzando por eso voy a estudiar un máster de recursos humanos».

En cuanto a la visión que tienen de los españoles, el primer tema de conversación es el fútbol. «Conocen a España por el fútbol, por ser campeones del mundo. Cuando quiero explicar que soy gallego les menciono al Dépor y la gente rápidamente ubica la zona», añade Lino.

Familia, amigos y comida

Son las tres cosas de las que se acuerdan cuando tienen morriña. «Echamos de menos la familia y los amigos, bueno y la comida también», afirman entre risas. La gastronomía malaya se divide en tres: cocina china, malaya e india. «La base de las tres es el arroz y los noodles (fideos alargados de color amarillento). También añaden carne de pollo o cerdo, vegetales y todo tipo de pescado», explica Lino.

Pero no todo es trabajo, ni estudiar también hay tiempo de ocio que dedican a viajar por las islas de Malasia o para visitar otros países del sudeste asiático. Una pareja que se ha afincado en territorio malayo y que han establecido los mimbres para ser felices entre las culturas orientales. Apoyados en su relación esperan encontrar un trabajo ideal.

También concuerdan en la personalidad de los malayos: «En general, son simpáticos y amables». Sin embargo, discrepan de los lugares con más encanto de la ciudad. Alba duda entre las Batu Caves, cuevas gigantes llenas de monos, o las torres Petronas, uno de los edificios más grandes del mundo. A su lado, Lino Díaz opta por la cultura con el barrio de Chinatown, Little India y la visita a la Mezquita Nacional de Kuala Lumpur. Se trata de los primeros pasos de un camino que van a recorrer juntos en la cultura oriental durante un largo período de tiempo. Ya están de lo más adaptados..

lino díaz y alba blanco informático y estudiante en kuala lumpur

Alba Blanco y Lino Díaz son una pareja que forjó en Ourense su relación y que se trasladaron a Kuala Lumpur en busca de nuevas oportunidades.

Lino Díaz Alonso nació el 25 de Mayo de 1989 en Ourense y permaneció en Santa Teresa de Jesús Carmelitas durante toda su educación infantil, primaria y secundaria, incluyendo los dos años de bachiller. Una vez aprobada la selectividad se trasladó a A Coruña para estudiar Ingeniera informática de sistemas. Mientras que Alba Blanco Cid, dos años menor, nació el 8 de junio de 1991 en la capital ourensana y pasó su infancia y adolescencia en el Luis Vives.

Sin embargo al acabar los estudios primarios, se trasladó al Instituto Otero Pedrayo para realizar el bachillerato social. La Universidad de Vigo fue su siguiente parada y con el título de la carrera de traducción e interpretación se fue a vivir con su novio a Kuala Lumpur.