Cuatro encapuchados asaltan la casa del cura de Esgos y se llevan 110 euros tras golpearlo

M. V

OURENSE

MIGUEL VILLAR

Los ladrones entraron en la vivienda parroquial tras cortar la línea de teléfono y sorprendieron al religioso mientras dormía

08 jul 2014 . Actualizado a las 07:15 h.

A Angelina la despertó, poco después de la medianoche del domingo, un grito cercano. El ama de llaves de la casa parroquial de O Pinto, en Esgos, escuchó como el párroco chillaba desde la habitación contigua y al abrir los ojos para levantarse, se llevó el susto de su vida. Un hombre encapuchado se acercó a ella y le ordenó que no se moviera, a lo que ella accedió dándose cuenta enseguida de lo que estaba pasando en la vivienda.

A unos pocos metros, en otra estancia, otros tres hombres, también con la cara tapada, habían despertado al párroco José Ramón Garrido Fernández, de 84 años, y lo estaban golpeando para que les entregase todo el dinero que hubiese en la casa. Mientras ella, de 86, suplicaba que se llevasen todo lo que quisieran pero que no les hiciesen daño, los asaltantes propinaron al religioso varios puñetazos en la cara y golpes en los brazos, e incluso llegaron a atarlo. Y todo para llevarse, según han hecho constar en la denuncia, 110 euros en efectivo. Luego huyeron sin dejar rastro y ayudados por la ausencia de testigos, ya que junto a la casa parroquial en la que residen los octogenarios no hay casas habitadas.

Los ladrones habían conseguido acceder al interior por una puerta trasera, a la que se llega desde una huerta. Además, para evitar ser descubiertos, cortaron la línea telefónica antes de entrar.

Debido a los golpes el sacerdote tuvo que recibir asistencia médica. Ayer, tanto él como Angelina se recuperaban del susto en la vivienda de algunos familiares mientras la Guardia Civil trata de dar con los ladrones. Por ahora se sabe que tenían acento gallego pero se trata de hallar otras pistas para poder arrestarlos.