El Concello de O Carballiño subrogaba a comienzos de diciembre del pasado año el servicio de «Axuda a domicilio» a la empresa Galaurea. Una decisión que, con el paso del tiempo, se ha demostrado como el origen de una creciente conflictividad laboral, denunciada por el grupo socialista y negada por el grupo de gobierno que preside Marnotes, que apela en todo momento a que según los usuarios la atención se está prestando con total normalidad. Al servicio están adscritas 15 trabajadoras, y en el momento de firmar el acuerdo entre Galaurea y el Concello, se puso como condición inexcusable el mantenimiento de las condiciones laborales que tenían las trabajadoras.
Este extremo no se ha cumplido por parte de la concesionaria, lo que se ha traducido en quejas antes la institución municipal y la presentación de denuncias por parte de seis de las trabajadoras ante el Xulgado do Social de Ourense. La vista por este caso ha sido fijada para el próximo día 22 de abril.
Incumplimientos
La nueva concesionaria del contrato del Servizo de Axuda no Fogar do Carballiño ha ido recortando derechos laborales y retribuciones a las trabajadoras, incumpliendo sistemáticamente el acuerdo alcanzado con el Concello.
Según fuentes del Concello carballiñés, en las irregularidades que se están produciendo desde que Galaurea se ha hecho cargo del servicio figuran aspectos como la bajada generalizada de sueldos ?y el cambio de salarios mensuales por pagos mediante bolsas de horas?, la bajada en el grupo de cotización, el retraso en el abono de las nóminas, el incumplimiento del acuerdo referido a los días de asuntos propios, la supresión de la referencia al convenio regulador de las condiciones laborales que se le aplica al personal, la anulación de los pluses por trabajo en festivos y fines de semana ?que ahora se paga como un día laboral normal?, descuentos en las retribuciones en caso de ingreso de los usuarios y otras irregularidades.
El incumplimiento de derechos adquiridos por el colectivo, como las horas de disposición personal, es otra de las circunstancias que ha cambiado con la nueva titular del Servizo de Axuda no Fogar en O Carballiño.
Los incumplimientos, según se reconoce desde el Concello, se registraron desde el primer momento y en la actualidad se ha sumado a la conflictividad laboral la presión sobre el servicio: el alcalde y la edila de Servizos Sociais, Argimiro Marnotes y Pura Alberte, anunciaron que velarían por el cumplimiento escrupuloso de la prestación, lo que se ha traducido en llamadas telefónicas a los beneficiarios del servicio para saber si tienen alguna queja con la atención que están recibiendo por parte de las trabajadoras. Cerca de 70 personas están adscritas al servicio, sin que se concedan nuevas altas a pesar de la lista de espera existente.