Los viticultores de O Ribeiro llevaron su protesta a las calles de la capital
18 sep 2013 . Actualizado a las 07:15 h.Los viticultores de O Ribeiro acercaron a la capital su situación laboral, a menos de 15 días de empezar la vendimia. La decisión de varias bodegas de no recoger la producción y de no garantizar precios que cubran los costes dejará a muchos trabajadores en una situación insostenible. El sindicato Unións Agrarias encabezó una protesta en la calle, con reparto de uva incluida, en la que quedó patente el malestar de los viticultores. «Queremos reunirnos en igualdade de condicións. A situación é difícil e dramática. Os que deixen de ser viticultores van a engrosar as listas do paro. Hoxe a única solución é que se garanta a recollida da uva e se cubran os custes de produción», explicaba ayer el secretario genera de agricultura extensiva de UU. AA., Xosé Ramón González, que añadía que una vez que se admita toda la producción se vigilará que los precios que se paguen sea dignos.
«Se entendemos que as industrias van a pagar por debaixo dos custes de produción, o sindicato vai ensinar aos consumidores e denunciar adega por adega, e marca comercial a marca comercial, a aquelas que especulen coa uva do Ribeiro e dos viticultores. Estamos nun problema e queremos defender a dignidade dos agricultores», subrayó. Desde Unión Agrarias creen que es imposible que las bodegas cuenten con excedentes, ya que indican que la cosecha del pasado año no fue abundante. «Cremos que é unha artimaña», explican y subrayan que si así fuera también estarían dispuestos a ayudar para terminar con este problema.
El sindicato estima que que el coste de producción en O Ribeiro para variedades autorizadas estaría en torno a los 50 o 60 céntimos el kilo y que para variedades preferentes sería cercana al euro.
Una de las soluciones, que aseguran desde el sindicato estaría en manos de la Xunta, sería la de premiar a las empresas que compren uvas a precios dignos. «Decimos á Xunta que faga un agravio en positivo para aquelas empresas que compren baixo contrato homologado e que cubran os custes de producción. Redireccionar ese diñeiro publico para garantir que non haxa problema de excedencia», subrayan.