Hallan muerto al octogenario que se perdió el domingo en Ourense

Marta Vázquez Fernández
Marta Vázquez OURENSE

OURENSE

Miguel Villar

Agentes de la Guardia Civil han localizado a mediodía el cadáver del hombre, que habló con sus hijos por teléfono por última vez a las tres de la tarde de ayer

12 feb 2013 . Actualizado a las 15:57 h.

Agentes de la Guardia Civil han localizado a mediodía de hoy el cadáver de Andrés Cadaya, el octogenario que se perdió el domingo en el paseo termal de la capital ourensana. Tras casi dos días de intensa busqueda el cuerpo ha sido localizado en un barranco situado cerca de la zona de Outariz, probablemente el mismo lugar en el que se cayó la víctima tras salir a dar un paseo y del que ya no pudo salir. La última vez que se tuvo contacto telefónico con él fue a las tres de la tarde de ayer, cuando habló con sus hijos y les dijo que estaba junto a un árbol y que no veía el agua.

Dos días siguiendo su rastro de las llamadas

El hombre, un vecino de Toén de 85 años, se perdió en la tarde del pasado domingo después de salir a dar un paseo por la zona termal situada en las orillas del Miño, en Ourense. A media tarde, el hombre llamó a sus hijos para decir que se había caído en un barranco y les dijo que se encontraba en la zona de A Chavasqueira. Tras ellos se puso en marcha un amplio dispositivo de búsqueda. Ayer por la tarde sus hijos consiguieron contactar con él por segunda vez. Tras muchas llamadas fallidas, a las tres de la tarde Andrés Cadaya contestó al teléfono. Eso, por un lado, tranquilizó a sus allegados, felices de saber que el octogenario había podido soportar, pese a estar al raso, las bajas temperaturas de la noche anterior. Aunque su voz era débil, pudo confirmar a sus hijos que se encontraba bien.

Sin embargo, la vaga descripción que ofreció sobre el lugar en el que se encuentra no ayudó a facilitar las cosas. Aseguraba que se cayó junto a un árbol, en una zona desde la que no ve el agua y que no está iluminada por las noches -gran parte de ese paseo sí lo está-, pero la descripción no fue suficiente para localizarlo. Además, la comunicación se cortó enseguida y en las horas posteriores ya no fue posible volver a contactar. El teléfono daba la señal de apagado, lo que indica que el móvil podría haberse quedado ya sin batería.