Francisco Rodríguez somete su continuidad como alcalde de Ourense a la decisión de las bases

Pepe Seoane, Miguel Ascón OURENSE

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El regidor asegura: «Nunca me aferrei a ningún cargo e non o farei agora». Ya está suspendido de militancia y se ha quedado en minoría en el concello tras romper el BNG el pacto de Gobierno

26 sep 2012 . Actualizado a las 00:16 h.

El alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, acaba de comunicar a la ejecutiva local del PSOE su intención de que lo «liberen» del compromiso que tenía con los ourensanos. La dirección del PSOE ourensano, tal y como explicó su secretaria general, Carmen Rodríguez Dacosta, no aceptó la dimisión del alcalde ni la de los seis concejales que, junto a él, pusieron su cargo a disposición de la ejecutiva: José Carlos Martínez-Pedrayo, Agustín Fernández, José Ángel Vázquez Barquero, Marga Martín, Áurea Soto y la propia Carmen Rodríguez Dacosta, edila no electa.

Ante esta situación, se ha decidido convocar una asamblea de militantes para que sean ellos los que tomen una decisión definitiva. Francisco Rodríguez explicó que tomó la decisión de dar un paso atrás para buscar «unha saída que garantice a gobernabilidade». Pese a todo se mostró «convencido» de su inocencia. «Nunca me aferrei a ningún cargo e non o farei agora. Se hai algunha causa pola que non se debería dimitir nunca é por unha imputación sen probas e sen ningún fundamento, pero o proxecto de cidade que está desenvolvendo o Goberno municipal é clave para o futuro de Ourense, e eu non seguirei un minuto como alcalde cando a persecución política á que estou sometido pode poñer en perigo esta proxecto. Pídovos, que axudedes a buscar á fórmula de gobernabilidade máis axeitada para manter un programa e un goberno socialista en Ourense sin a miña presencia na alcaldía», aseguró ane sus compañeros de partido el alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez.

La declaración llega tras una reunión de varias horas sobre su futuro con la ejecutiva local del PSOE ourensano para dar las explicaciones pertinentes sobre su implicación en la operación Pokémon. Así lo aseguró el regidor a su llegada al restaurante San Miguel, donde se celebró el encuentro. Rodríguez decía que ya tiene una idea pero que serán sus compañeros de partido los primeros en saberlo. Al mismo tiempo, se celebraba también en Ourense una reunión de la ejecutiva provincial para analizar la situación del regidor.

A su llegada a la reunión, Francisco Rodríguez dejó clara su idea: «Permítanme que teña este contacto con eles para facer una reflexión sobre a situación. Primeiro o falamos e despois tomamos unha decisión. Que sexan eles [a executiva] os primeiros en saber. Quero dar explicacións sobre a miña inocencia. Desexo ademáis atopar unha solucion e colaborar coa xustiza e a xuíza», dijo el alcalde de Ourense al acceder al local.

Ruptura con el BNG

La decisión de Francisco Rodríguez de aferrarse al bastón de mando en Ourense tras su imputación en la operación Pokémon ya tiene consecuencias: el BNG ha roto el pacto de Gobierno en la ciudad de As Burgas. El Ejecutivo local se queda en minoría.

La ruptura ha sido anunciada poco después de la una por la hasta ahora teniente de alcalde, Isabel Pérez, con la lectura de un comunicado. Los nacionalistas «garantizarán a gobernabilidade» hasta la próxima junta de Gobierno local en la que se deben designar los relevos. Si el alcalde no provee reemplazos a tiempo para sus concejales, dimitirán «de forma irrevogable».

«Para nada, no creo que hoy dimita nadie»

El regidor, que ha puesto su cargo a disposición de la ejecutiva local del PSOE, afín a él, se queda con 11 concejales en una corporación de 27. Varios de esos ediles los controla Pachi Vázquez, líder de los socialistas gallegos y enfrentado a Francisco Rodríguez. La reunión clave se celebra por la tarde.

Esta mañana uno de los ediles más próximos al regidor, el responsable de Termalismo y Promoción económica, José Ángel Vázquez Barquero ha realizado la siguiente declaración: «Todos los concejales obedecerán al partido». Preguntado sobre una posible dimisión del alcalde, respondió con un rotundo: «Para nada, no creo que hoy dimita nadie».