Luces y sombras en A Malata

DAMIÁN DOMÍNGUEZ

OURENSE CIUDAD

30 abr 2012 . Actualizado a las 07:03 h.

El CD Ourense perdió el liderato en un partido en el que mostró varias versiones. Comenzó bien, mandando sobre el terreno de juego, impidiendo al Racing hilvanar su juego y creando buenas ocasiones de gol que se fueron al traste por la endémica falta de definición de los rojillos.

A pesar de la buena imagen, el empate que campeaba al descanso no servía a nuestros intereses. La victoria se antojaba indispensable para mantener el liderato. El partido demandaba una marcha más.

Esa marcha a mayores se la inyectó el Racing. Los verdes volvieron más concentrados y enchufados de los vestuarios. Parecía que eran ellos los que más se jugaban. Sin grandes alardes profundizaron por el boquete izquierdo de la defensa rojilla hasta lograr un gol a la salida de un córner.

Esta sombría cara de los rojillos se mantuvo hasta el gol de empate. Entonces sí, en esos diez últimos minutos sí apareció esa versión decidida, valiente y osada que estuvo oculta toda la segunda mitad. En ese corto tramo final los rojillos crearon más ocasiones de gol que en los ochenta minutos anteriores. Demasiado tarde.

Ahora nos intentarán convencer del enorme logro que supone disputar la promoción. Pero no, eso es una obligación para este club. El verdadero éxito sería quedar campeón y alcanzar el ascenso.