La vida después de una desgracia

C. Paradela RIBADAVIA

OURENSE

MARÍA MIGUÉLEZ

Crónica | Accidentes en la comarca de O Ribeiro La explosión de un televisor en una casa de Cenlle y un incendio en otra de Arnoia modifica de forma radical la vida de las personas que residían en ellas

09 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Un suceso inesperado o un incidente determinado pueden cambiar la vida de forma totalmente radical en apenas unos minutos. En la comarca de O Ribeiro los últimos días han sido aciagos en este sentido para varios vecinos, en concreto del municipio de Cenlle y del de Arnoia, ya que debido a la explosión de un televisor que destrozó la vivienda de Anselmo V.F., y por un incendio, que destruyó el tejado, el desván y una habitación completa de la casa de Luis y su mujer, su rutina diaria se ha visto vulnerada. La atención inmediata de los servicios sociales, tanto del Ayuntamiento de Ribadavia, en un primer momento, como del de Cenlle y la mancomunidade de concellos de O Ribeiro está permitiendo que Anselmo viva desde el pasado domingo en un hostal de Ribadavia, cuyo pago están asumiendo las arcas municipales de Cenlle. El Ayuntamiento está además llevando a cabo todo el proceso del arreglo y acondicionamiento de la vivienda dañada. Un operario municipal revisó ya la instalación eléctrica para comprobar donde pudo producirse la deficiencia y se está procediendo ya a los trabajos de limpieza y posterior pintado del inmueble dañado. El televisor no ardió, ya que no producen llamas en la explosión, según los técnicos, pero sí provocó un polvillo negro que cubre todas las dependencias de la casa e incluso la ropa de Anselmo, que ha tenido que ser llevada en su totalidad a la tintorería. Los servicios sociales mancomunados han iniciado además el proceso para conseguirle una ayuda, además de atención continuada al afectado, con asiduas visitas de la asistenta social, como en la mañana de ayer, hasta que pueda volver a su hogar. El caso de Luis y su mujer en Arnoia es diferente al contar con el total apoyo de sus familiares y al haber podido además pasar la noche en su propia vivienda, ya que el aviso de los vecinos y su celeridad evitaron que el incendio se propagase y que afectase sólo a una parte del inmueble. Los daños en la edificación son palpables y en el patio de la casa de los familiares de Luis y de su esposa, convaleciente de una enfermedad, se acumulan los muebles ahumados para su reparación. La gran preocupación de Luis, que asegura sentirse más tranquilo quedándose en su hogar «por si volve pasar algo», es arreglar cuanto antes el tejado ante el aviso de lluvias de estos días que puede afectar aún más la estructura del edificio. Su cuñada destaca la reacción y solidaridad de los vecinos al evitar daños mayores.