Peeeeeedro y los dos PSOE

César Casal González
César Casal CORAZONADAS

OPINIÓN

23 may 2017 . Actualizado a las 08:29 h.

Penelopé Cruz gritó desde la tribuna de los Óscar el nombre de Peeeedro cuando vio, tras abrir el sobre del veredicto, que su mentor y amigo era el ganador del premio de la Academia. La militancia del PSOE pegó el domingo el mismo grito. Pedro Sánchez ganó sobrado. El palo para Susana Díaz ha sido tremendo. La democracia es lo que tiene. Jorge Luis Borges perdió un premio Nobel de Literatura por bromear sobre ella: «La democracia, ese curioso abuso de la estadística». Nadie sabe lo que sale de la boca de las urnas. Pedro Sánchez tenía una ventaja. En España, para ganar, hay primero que perder. En España nos gusta atizar a la gente y hacerla sufrir antes de que lleguen. Susana Díaz tenía el apoyo antediluviano del aparato y el de su Andalucía inmensa. Pero Pedro le contaba al militante de corazón a la izquierda y harto de mesianismo de Pablo Iglesias Turrión lo que quería oír: conmigo el PSOE volverá a ser zurdo, sin populismos estériles. Borrado estaba el pacto con Ciudadanos, por ejemplo. La gente votó con el corazón. Pero, a pesar del triunfo incontestable (en Cataluña, brutal), el lunes 22 de mayo, España se levantó con dos PSOE, los que ya había. Más fractura en la izquierda, algo que está en la historia de este país. La lucha fratricida nos deja más polarizados y partidos de lo que ya estábamos. Las dos Españas, pero en un mundo nuevo. El partido oficial, de toda la vida, el PP, y el populismo que crece. Y ahora este PSOE zarandeado al que ya le reclaman desde Podemos una moción de censura agarrándose al mandamiento que más repite Sánchez: «No a Rajoy». Y encima, Cataluña y ruptura con rango de ley. Ni el opio del fútbol funciona ya para estar tranquilos. Estamos en cuidados paliativos. Sin centro.