Asesinato en el Comité Federal

Ernesto Sánchez Pombo
Ernesto S. Pombo EL REINO DE LA LLUVIA

OPINIÓN

30 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El llorado Vázquez Montalbán nos hizo felices con la ya histórica novela Asesinato en el Comité Central. Recordarán que narraba una reunión del Comité Central del Partido Comunista en Madrid, durante la que se producía un apagón y cuando la luz regresaba, en solo unos segundos, el secretario general, Fernando Garrido, había sido asesinado de una puñalada en el pecho. Del caso se encargó el investigador Pepe Carvalho, un lince, que lo resolvió con éxito. Como siempre.

Y es que los comités de los partidos, también los comités federales, son lugares que entrañan serios peligros para quienes tratan de imponer sus posturas ante asuntos trascendentales. Sin ir más lejos, el socialista Pedro Sánchez vivirá hoy una reunión de gran riesgo y que puede resultar fatal porque bien pudiera acabar con su vida política.

Porque frente a sus razones de Gobierno de progreso y de que no se puede dejar gobernar al partido de los corruptos, que probablemente esconden también el yo no quiero irme, estarán las fuerzas pesadas o vieja guardia, la mayoría dedicada al dolce far niente y al entretenimiento en tertulias sacerdotales. Corcuera, Leguina, González, Solchaga, Almunia, sobrinos, primos y demás familia apuestan por dejar que sigan los populares, no sabemos si con la intención de acabar con Sánchez, o a la espera de que el PP se estampe contra los difíciles tiempos que se nos avecinan.

Nunca la vida política de Sánchez corrió tan alto riesgo como hoy, por mucho que su fiel escudero César Luena, hombre de gran espíritu y poder de convicción dicho sea de pasada, quiera convencernos de lo contrario. Así que, por el bien de todos, lo mejor es que no se produzca un apagón. No vaya a ser que tenga que volver Pepe Carvalho.