Podemos y la concertada

José Ramón Amor Pan
José Ramón Amor Pan LÍNEA ABIERTA

OPINIÓN

22 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, decía el otro día en una entrevista que, si llegase a gobernar, reduciría la educación concertada a situaciones experimentales. La propuesta no es nueva, ya iba en su programa electoral de las europeas. Más allá de lo enigmático de la expresión (¿qué son situaciones experimentales?), obviando también las disquisiciones más teóricas sobre el derecho constitucional a educar en las propias convicciones éticas y religiosas, y dejando de lado alguna que otra incoherencia (el primer acto de Podemos en A Coruña para las europeas se celebró en un colegio concertado, religioso por más señas), me gustaría centrarme en las cuestiones prácticas que tendría dicha medida.

¿Qué pasaría con los dos millones de alumnos de la escuela concertada? ¿Podrían asumirlos los actuales centros públicos? ¿Cuál sería el destino de los 130.000 profesores que trabajan en este sector? ¿Los mandamos al paro o los convertimos en funcionarios por la puerta de atrás?

¿Cómo se financiaría esta decisión? Porque un alumno de la educación concertada le cuesta al Estado un 40 % menos que uno de la pública, es decir, el Estado necesitaría incrementar su presupuesto en esta materia un 40 %, aparte de lo que necesitaría invertir para construir todos los colegios que serían necesarios (salvo, claro está, que se hiciera lo de la Cuba revolucionaria). Un absurdo, se mire por donde se mire.