Podemos está expresando sus valores máximos

Jaime Miquel
Jaime Miquel TRIBUNA ANALISTA ELECTORAL

OPINIÓN

17 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Se puede concluir que el barómetro de octubre del CIS expone los valores máximos de la oferta electoral Podemos, capaz de sumar 5,2 millones de votos, que representan el 22 % de los válidos y proporcionan 80 escaños. Son valores máximos, sobre todo porque no hay más mercado. La zona de ruptura del español con su sistema de representación tiene un tamaño total de unos ocho millones de electores, pero esto incluye a otras formaciones como el Partido X o Recortes Cero y la derecha extrema que también es ruptura.

En segundo lugar, lo que está sucediendo en España no es distinto de lo que sucede en Grecia y en Italia en términos electorales. Luego tenemos otras medidas del fenómeno y algunas son muy cercanas: en el año 2013 AGE marcó en Galicia registros máximos del 20 % de los votos válidos en las encuestas, por poner un ejemplo.

En tercer lugar, los datos del barómetro de octubre del CIS reflejan cierto «efecto Sánchez», que es coincidente con otro «efecto tarjetas» sobre el electorado del PP, y un tercer efecto llamada del resultado europeo de Podemos, pero sobre todo la promoción no deseada que viene haciendo el sistema mediático de esta oferta electoral desde que existe. En España no se habla de otra cosa desde que apareció en el sondeo preelectoral del CIS para las elecciones europeas. Entonces su previsible resultado eran el 1,8 % de los votos válidos y un eurodiputado.

En cuarto lugar, la intención de voto actual a Podemos recoge la expectativa ciudadana intacta; hasta ahora, han aglutinado un voto que es transversal en lo ideológico, lideran la expectativa del orden nuevo y no han hecho grandes renuncias, pero matizarán esa ilusión colectiva. En quinto lugar, la progresión meteórica de Podemos vuelve a movilizar a determinados electores temerosos del entorno del PP, pero también a otros del PSOE. Socialistas y populares mejorarán los registros de este barómetro de octubre del CIS, porque además del moderado efecto Sánchez, que indica un cambio de tendencia, el PP debe recuperar volumen por este factor miedo, hasta sus siete millones de votos habituales.

Por último, en la medida en que los dirigentes de Podemos no sepan zafarse del gen latinoamericano, que no tiene nada que ver con el doble paradigma insatisfecho de nuestras sociedad total, que es la potencia europea occidental, el pueblo de Europa, perderán sentido. Y en la medida en que se sientan cómodos en el lado izquierdo, y se les ve encantados, transversalidad.

Aparte, otras cuestiones como la monarquía o el modelo territorial, en tanto no den respuestas claras, y no las dan, o abandonen el lugar estratégico inexpugnable, que es la moratoria en el pago de la deuda mientras no esté auditada, y lo abandonan, perderán votos. La inteligencia electoral de esta formación está siendo notable, pero no terminan de entender que su sitio es enfrente, ni en la izquierda ni abajo. Son suficientes razones pera considerar que difícilmente mantendrán estos registros en el tiempo. Aún así, sus resultados en el temible 2015 serán espectaculares.