En una entrevista (La Voz de Galicia, 19 de septiembre) a Cirac, director del Instituto Max Plank de Óptica Cuántica de Alemania y uno de los padres de la computación cuántica, señala el científico: «En Alemania existe una tradición científica abrumadora, la ciencia está impregnada en la sociedad. En España [la ciencia] está aparcada social y políticamente». ¡Qué tristeza! Todos y cada uno de nosotros, la sociedad entera, deberíamos preguntarnos qué podemos hacer para que esta situación cambie y algún día la ciencia impregne la sociedad española. Todos podemos aportar algo. Los profesores de ciencias, haciendo atractiva la enseñanza e inculcando vocaciones; los políticos, con leyes que favorezcan el aprendizaje de las ciencias; las instituciones científicas, divulgando sus logros; las librerías (acaba de inaugurarse una en Pontevedra que tiene las estanterías rotuladas según su contenido y no hay ninguno que ponga Ciencias); etcétera.