Ladrillo barato

La Voz DE SOL A SOL

OPINIÓN

16 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El paisaje de algunas de las zonas de la costa lucense es un muestrario de las consecuencias de la burbuja inmobiliaria. Las urbanizaciones vacías dan cuenta de lo que aquello iba a ser y no fue. Ahora, mejor vender barato que no vender, pues los ladrillos no se comen. De los ayuntamientos es la responsabilidad de vigilar que las viviendas tengan acceso a los servicios. Su futura ocupación dará vida a esos lugares.