Les da lo mismo

Jaime Miquel
Jaime Miquel AL DÍA

OPINIÓN

25 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Lo último es la proclamación de Elena Valenciano como cabeza de lista del PSOE, por lo que las primarias ciudadanas que enuncian deben estar en el mismo sitio que su España federal, que es el armario de los trucos. Se comportan como clase eligiendo a Valenciano, pareja política de Rubalcaba y pura generación política de Zapatero, como la olvidada Leire Pajín. Una candidata para optar a 16 o 17 eurodiputados con 4 millones de votos y perder por dos actas contra el PP; para retroceder no menos de 2,7 millones de votos respecto al año 2009. Son los mismos que perdieron en el año 2011 y nos vienen a decir que esto es lo que hay.

Si el cálculo es que Vox, el nuevo partido de José Antonio Ortega Lara y Alejo Vidal-Quadras, le va a quitar electores al PP y, como consecuencia, ganará el PSOE de Valenciano para gloria de Rubalcaba, es erróneo. Muchos de esos votantes del PP del 2008 ya no votaron a Rajoy en el año 2011 y ninguno ahora, están todos en la abstención. Luego Vox lo único que va a hacer es incorporar a personas que no habrían votado a nadie, minorando los porcentajes de votos válidos de los demás; pero, además, quien deja de optar a ellos es UPyD, no el PP de Rajoy.

Por lo que respecta al PP, el posicionamiento de Vox les ha destrozado la estrategia. El problema lo tenían planteado en su flanco derecho y lo estaban resolviendo, la prensa de Madrid no se entera. La desmovilización del bipartidismo es masiva, son más de 10 millones de personas las que han dejado de votar al PSOE o al PP desde el año 2008 y, naturalmente, quienes más se marchan son los electores centrales de la escala izquierda-derecha, por la razón simple de que son los que más abundan. La diáspora es tal que quienes más quedan en el PP son otros electores situados en el lado derecho de esta escala. Sin embargo, ese voto incondicional del PP no es ideológico: es económico y sumiso al euro, y es conservador porque sus rentas son más altas, también sus tasas de empleo y se benefician más que otros de un sistema que hace soportar el coste de la corrupción y la crisis en las rentas medias y bajas. Y todos saben mirar para otro lado en asuntos como el de Bárcenas. Estos, y otros ubicados en el mundo rural, envejecido y ausente, también clientelar. El PP acertaba tratando de recuperar al desmovilizado del flanco derecho, los que conserva se cuidan solos, pero ya está Vox diciendo que hay que liquidar las comunidades autónomas, ilegalizar a Amaiur, encarcelar a Artur Mas y prohibir el aborto: ahí ya no llegan Aznar ni Esperanza Aguirre.

Ya solo pueden resistir, porque recuperar los electores centrales no es cuestión de candidatos, tampoco de bajar impuestos dentro de un año, si acaso mañana mismo. Es cuestión de resolver el futuro de la generación más joven del cuarto PIB de la zona euro, que es similar al francés si lo dividimos entre el número de habitantes. La gente les hace responsables de esta burla y el bipartidismo sumará 8 millones de votos en mayo, algo más del 20 % del censo, aunque 35 de los 54 eurodiputados, el 65 %. Es lo que hay.