La Fundación María José Jove rompe la barrera del arte para los invidentes

Fernando Molezún A CORUÑA / LA VOZ

CULTURA

PACO RODRÍGUEZ

«Mirar conTACTO» presenta cuatro cuadros reproducidos en relieve

02 dic 2014 . Actualizado a las 09:28 h.

«La muralla que hasta ahora separaba a los invidentes de los lienzos más hermosos está a punto de caer». Con estas palabras definió ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, el enorme paso que supone en el terreno de la integración y de la promoción cultural la iniciativa puesta en marcha por la Fundación María José Jove con la colaboración de la Obra Social de la Caixa bajo el nombre de Mirar conTACTO. Pintura para discapacidad visual. Se trata de una exposición que pretende acercar el mundo del arte a través del sentido del tacto y que se presentó ayer en la sede de la fundación en A Coruña.

En la inauguración de esta muestra estuvieron presentes, además de Feijoo, el alcalde de A Coruña, Carlos Negreira; la conselleira de Traballo, Beatriz Mato; la delegada territorial de la Xunta Belén Docampo; el concejal de servicios sociales coruñés, Miguel Lorenzo; el delegado de la ONCE en Galicia, Manuel Martínez Pan; el director territorial de La Caixa en Galicia, Marc Benhamou, y Felipa Jove, presidenta de la fundación anfitriona.

Regoyos, Casas, Dalí...

Para conseguir este efecto de relieve se utiliza una técnica de reproducción llamada Didú, realizada por los Estudios Durero de Bilbao, que confiere una importante riqueza de texturas a imágenes planas. Hasta el momento, la Fundación María José Jove ha trabajado sobre cuatro obras pertenecientes a su colección: Vista de pésame, de Darío Regoyos; Queens of London, de Carlos Alcolea; Interior con Julia, de Ramón Casas, y Madonna con rosa mística, de Salvador Dalí. Cuatro cuadros que son una muestra de distintos lenguajes plásticos del último siglo.

La aplicación de esta técnica permite que las obras sean tocadas pero, además, también pueden disfrutarse mediante el sentido de la vista. Incluso el oído juega un papel importante en la apreciación de estas piezas, ya que su exploración va acompañada por la locución de una audioguía que va dirigiendo y explicando el recorrido táctil de cada obra. De este modo, se abre un nuevo mundo de posibilidades en el arte para las personas con discapacidad visual.

Esta experiencia pionera -en España solo se ha desarrollado en un museo en Bilbao, y la pinacoteca del Prado está trabajando en ello- supone un primer paso en la consecución de la primera sala de arte accesible de Galicia, que desde la Fundación María José Jove quieren que se vaya enriqueciendo con nuevas obras en un futuro próximo, según avanzó Felipa Jove.