Xavier Bermúdez: «Actualmente es más difícil lograr distribución que dinero para rodar»

Javier Becerra
Javier becerra A CORUÑA / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

La película de Xavier Bermúdez «O ouro do tempo», que llega hoy a los cines

01 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Después de su periplo por festivales nacionales e internacionales, O ouro do tempo llega a las salas comerciales. Se trata del último filme de Xavier Bermúdez (Ourense, 1951), inspirado en un hecho real. Un hombre conserva criogenizado el cadáver joven de su mujer fallecida por si algún día la ciencia permite volverla a revivir. «Es una historia muy llamativa que me impactó. Pensé en cómo sería el día a día de este hombre», explica el director.

-¿Es un acto de rebeldía hacer un filme reflexivo hoy en día?

-No, pero sí que es un filme que se opone a las prisas. Retrata a un hombre en el campo y se cuenta con humor y sentimiento.

-Debuta con usted Ernesto Chao. ¿Por qué lo eligió?

-Buscaba a un hombre de cierta edad y conocía alguno de sus trabajos. Lo conocí personalmente. Vi cómo hablaba, cómo miraba y cómo gesticulaba y me gustó. Creo que es uno de los grandes aciertos de la película, ya que hace una interpretación notable.

-¿Son Víctor Erice y Buñuel sus grandes referencias?

-Son dos de ellas, porque he aprendido mucho estudiando sus películas de un modo muy especial. Pero hay muchos más, como Robert Bresson, Fellini... son muchos los que me gustan.

-Al fin ha logrado la distribución nacional. ¿Ha costado?

-Sí, se estrenará poco a poco a nivel nacional. La lucha por cerrar salas es muy dura. Las dos cosas son complicadas, pero actualmente casi es más difícil lograr una buena distribución que dinero para rodar.

-¿Y cómo lo tienen cineastas como usted, que filman en gallego y con bajo presupuesto?

-Muy complicado. Cuesta llegar a las salas y, además, la gente ahora va muy poco a las salas.

-¿El filme se doblará fuera de Galicia?

-No, se rodó en gallego y será en gallego en todas partes, con los subtítulos que correspondan.

-¿Es una decisión suya?

-Sí, no me gustan los doblajes y creo que las películas tienen que verse en versión original. La gente hoy ve series subtituladas y se acostumbra. El doblaje es un negocio grande, hay intereses y a las multinacionales le interesa mantenerlo.