Un amigo lo encontró en su apartamento con una jeringuilla en el brazo
03 feb 2014 . Actualizado a las 11:32 h.El actor estadounidense Phillip Seymour Hoffman, de 46 años y ganador de un Óscar en el 2005 por su papel en Capote, fue hallado muerto ayer en su apartamento de Greenwich Village, Nueva York, con una jeringuilla bajo el brazo. La policía investiga aún las causas del óbito, que deberán determinar los forenses, aunque todo parece indicar que se trata de una sobredosis. «Está bastante claro que fue una sobredosis. La jeringuilla estaba en su brazo», dijo un agente a The New York Times.
El intérprete tenía problemas con el alcohol y con las drogas. Recientemente había confesado haber tenido problemas con los estupefacientes en el pasado, aunque volvió a recaer. Así, en mayo pasado estuvo ingresado durante diez días en una clínica de rehabilitación para desintoxicarse. «He metido la pata después de 23 años limpio», llegó a reconocer en la web TMZ.
Seymour Hoffman fue encontrado en su domicilio por un amigo guionista, que no había conseguido contactar con él por teléfono. Entonces, preocupado, decidió acercarse a su vivienda y fue cuando lo halló sin vida.
Seymour, padre de tres hijos, saltó a la fama en 1997 por su papel de Scotty J., en el filme Boogie Nights. Obtuvo el Óscar a mejor actor por su personificación de Capote, rol que también le valió el Golden Globe en el 2006. También intervino en películas conocidas como Magnolia y El gran Lebowski y fue tres veces candidato al Óscar como secundario por La guerra de Charlie Wilson, La duda y The Master. Fue uno de los rostros fundamentales del cine estadounidense más arriesgado. Pero su talento fue apreciado rápidamente por Hollywood, lo que le llevó a películas taquilleras como Misión imposible III» y Los juegos del hambre.
Nacido como Philip Hoffman en julio de 1967 en Nueva York, era el tercero de cuatro hijos de un ejecutivo de Xerox y una ama de casa feminista que se divorciaron cuando tenía nueve años. Atleta entusiasta, el fornido Hoffman se involucró en el teatro escolar tras sufrir una lesión.