La localidad lucense es el único lugar en el que se exhiben las piezas fuera del Grand Palais
12 ago 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Este privilegio se debe únicamente a que el fallecido creador sarriano y referencia artística en la capital gala, José Díaz Fuentes, decidió hace nueve años que su villa natal, en pleno Camino Francés, era el lugar idóneo para una muestra tan universal.
La muestra pasó de ser anual a convertirse en bienal tras la muerte de Díaz Fuentes, y su viuda, Florence Normier, es ahora la encargada de continuar con el legado del artista.
El certamen cumple su séptima edición y cuenta con más de trescientas obras de casi doscientos artistas de doce países. Entre los participantes hay una amplia representación de creadores gallegos como Violeta Bernardo, Luis Ospido, Machús o Xosé Marra.
El presidente del Salón de Otoño de París, Noël Coret calificó esta exposición como la más completa de todas las que se celebraron hasta el momento. «En estos momentos seguro que Díaz Fuentes tiene que sentirse muy feliz y orgulloso de comprobar cómo el proyecto que comenzó hace siete años alcanza un nivel tan elevado. Podemos decir que alcanzó su sueño con creces en un año en el que la calidad de todos los trabajos es impresionante».
La mayoría de las obras son esculturas o pinturas, pero este año la gran novedad es que hay un apartado para el arte audiovisual en una sala dedicada a esa especialidad en la antigua cárcel.
Las personas interesada en visitar esta exposición podrán hacerlo hasta el próximo día 20 en el que se cerrará al público. El último día será muy especial, ya que el acto de clausura se celebrará en el nuevo auditorio al aire libre en el parque de As Ínsuas, formado por una composición de una treintena de grandes figuras de Díaz Fuentes.
La antigua cárcel comarcal de Sarria y los monasterios de A Madalena, en Sarria, y Samos, son los tres únicos lugares en los que los amantes del arte podrán contemplar algunas obras de las que se exponen habitualmente en el Salón de Otoño del Grand Palais de París.