Fallece Fischer-Dieskau, el mejor cantante del siglo XX

césar wonenburger A CORUÑA

CULTURA

El barítono es uno de los artistas que más discos registró en la historia de la música grabada

20 may 2012 . Actualizado a las 06:57 h.

Dietrich Fischer-Dieskau, el cantante más importante del siglo XX, falleció esta semana a los 86 años en Stamberg, cerca de Múnich, rodeado de sus familiares, según informó su última esposa, la soprano Julia Varady. Buena parte de la vida profesional del barítono, uno de los artistas que más discos registró en la historia de la música grabada, transcurrió entre Berlín y Múnich, en cuyos teatros sentó cátedra por la profundidad de sus interpretaciones, basadas en el más auténtico, escrupuloso y fiel respeto a la transmisión del espíritu de cada obra.

De Monteverdi a Reimann, como reflejan los deuvedés de Arthaus que estos días están recuperando algunas de sus legendarias colaboraciones berlinesas en los años sesenta junto a artistas como Pilar Lorengar, James King, Elisabeth Grümmer o Ferenc Fricsay, Fischer-Dieskau fue un maestro supremo del «recitar cantando» que intentaba iluminar, con matices siempre nuevos, todo cuanto interpretaba. Sus esclarecedoras reflexiones pueden rastrearse en libros tan imprescindibles como Hablan los sonidos, suenan las palabras (Turner), suma y compendio de toda su sabiduría.

A pesar de haber cultivado todos los géneros -también dirigió brevemente, sobre todo las sinfonías de Schubert-, el cantante berlinés pasará a la historia como el principal intérprete del Lied, el encuentro más elevado entre música y poesía. A lo largo de su prolífica carrera, dejó grabados todos los Lieder de Schubert, Schumann y Wolf, entre otros. Pero sobre todo serán para siempre sus intensas recreaciones de ciclos señeros como El viaje de invierno o La bella molinera el mejor testimonio de un intérprete que entendía el canto artístico como «un lazo de vigencia general y compromiso cultural entre los hombres» a través de los siglos.