El técnico obradoirista destaca el «gran derroche de energía» de sus jugadores
18 mar 2017 . Actualizado a las 23:55 h.Para Moncho Fernández, entrenador del Obradoiro, hubo dos cuartos que fueron «fundamentales». El segundo, porque el Obradoiro recuperó oxígeno y llegó con vida al descanso. Y el tercero, en donde el conjunto santiagués mató a triples al Real Madrid, todo un especialista en lanzamientos de larga distancia. «El tercer cuarto claro que fue clave, pues hicimos siete triples seguidos. El acierto es fundamental para superar a un rival de este nivel. Para ganarle al Real Madrid hay que hacer un partido brillantísimo», reconoce el técnico de Pontepedriña. Después, el Obra «gestionó como buenamente pudo la ventaja y llegó entero al final, con mucho acierto en los tiros libres».
El cinco compostelano no arrancó todo lo bien que quería Moncho Fernández en las acciones defensivas, algo que sí cambió en los segundos diez minutos. El Obra se recuperó, plantó cara y acabó el primer tiempo con muy buenas sensaciones. Insiste: «A todos nos vienen a la menta los triples del tercer cuarto, claves para adquirir ventaja en el marcador, pero fue importantísimo que llegásemos vivos al descanso. Estuvimos brillantísimo en defensa, en la pelea por el rebote, en que no anotasen en el contragolpe y muy bien también en el uno contra uno».
Moncho Fernández destaca que el Obradoiro «demostró fortaleza hasta el final, un gran derroche de energía, pues en el aspecto físico el equipo estuvo francamente bien. El quinteto final llegó bien de forma». El técnico va más allá: «No nos vamos a rendir, vamos a seguir peleando. El equipo en eso no fallará y nunca bajará los brazos. Estamos en una situación delicada, pero los chicos creen en esto y cuando tienes compromiso sabes que las cosas van a llegar».