El pívot sufrió una fractura de tibia en el último entrenamiento y agrava la plaga de lesiones del equipo compostelano
22 feb 2017 . Actualizado a las 22:14 h.Solo el Barcelona sufre una temporada más aciaga que el Obradoiro en materia de lesiones, si bien con una diferencia sustancial: el club azulgrana tiene más dinero y un equipo filial para buscar soluciones. Y aún así, acusa los embates.
Esta vez en Sar el damnificado es Rosco Allen, en otro percance pleno de infortunio. En el entrenamiento de la mañana, ya en la recta final, se llevó un rodillazo involuntario de un compañero e inmediatamente todo el grupo fue consciente de que la lesión era grave. Minutos más tarde, en el policlínico La Rosaleda, se confirmaba un diagnóstico que supone el adiós a la temporada: fractura de la tibia de la pierna izquierda.
Ante tal tesitura, el club se ve obligado a hacer un nuevo esfuerzo en el capítulo de gastos, después de los que ha tenido que acometer en las contrataciones de Dulkys y Matulionis para cubrir las bajas de Alberto Corbacho y Txemi Urtasun.
El Obradoiro no podrá acudir al mercado extracomunitario, ya que las dos plazas disponibles están cubiertas por McConnell y Whittington. Tampoco puede llegar ningún jugador procedente de equipos de la Liga Endesa, porque el plazo de trasvases está cerrado.
Desde hace semanas, el club está muy atento al mercado, en busca de alguna oportunidad que pudiese oficiar como revulsivo. Pero tenía puesto el radar en el perímetro. Se decantaba por un tirador, a la espera de entrase en el punto de mira alguna pieza que no fuese prohibitiva.
Las nuevas circunstancias convierten en perentoria la necesidad de fichar. Las limitaciones presupuestarias obligan a pensar más en traer el mejor jugador posible que en buscar un perfil concreto. Y, tras la lesión de Allen, el Obradoiro amplía su radio de acción al juego interior.
Hasta la fecha, solo cinco jugadores han participado en los veinte partidos disputados por el equipo. Uno de ellos es Rosco Allen. Corbacho se lesionó en la primera jornada; Urtasun solo ha participado en seis partidos y le queda más de un mes en el dique seco; Matulionis se perdió dos meses; McConnell, un mes; Llovet, las cinco primeras jornadas; y Pozas un encuentro, además de participar en varios con molestias en un tobillo.