El Obradoiro pierde con Fuenlabrada y encadena su tercera derrota

Ignacio Javier Calvo Ríos
Naso Calvo SANTIAGO

ANDAR MIUDIÑO

SANDRA ALONSO

El equipo santiagués sigue acusando el golpe de la Copa y la baja de Andrés Rodríguez

28 ene 2013 . Actualizado a las 12:02 h.

El Obradoiro no pudo con Fuenlabrada (73-79) y encadenó su tercera derrota consecutiva. En un partido lleno de alternativas, el equipo santiagués no pudo con el madrileño e incluso estuvo cerca de perder el básketaverage. El Obra sigue acusando el golpe sicológico de quedarse fuera de la Copa del Rey y la baja por lesión de Andrés Rodríguez.

El equipo santiagués se arrugó en la recta final. Le tembló el pulso y los madrileños no se dejaron intimidar. La primera y la última canasta del primer cuarto llevó la firma de Alberto Corbacho, que estuvo muy vigilado y apenas pudo respirar. Sin embargo, el mallorquín impidió que el Fuenlabrada se fuese al primer descanso con una mayor ventaja (22-27). En el primer cuarto, Valters (trece puntos y tres triples) fue una pesadilla para los santiagueses. También lo fue Jon Cortaberría (dos triples). Los pupilos de Moncho Fernández no tuvieron muchas opciones de anotar desde la distancia. Por eso, Rafa Luz y Jorge Sanz buscaron las torres y la anotación desde el interior.

Mejri mantuvo con vida al Obra, pero después, tras un tiempo muerto, fue Levon Kendall quien marcó el paso. El canadiense convirtió tres canastas en dos minutos que dieron oxígeno al cinco compostelano. En el segundo cuarto, Dewar salió para descongestionar el ataque local. Y un lanzamiento triple suyo (el único de los santiagueses en el primer tiempo) permitió al Obra alcanzar el empate (27-27). Dos tiros libres de Jorge Sanz pusieron al cuadro gallego por delante.

Moncho Fernández empezó a mover con intensidad el banquillo, buscando mayor frescura en los ataques y una defensa más agresiva. El Fuenlabrada empezó a sentirse incómodo. Comprobó que jugar en la caldera de Sar requiere un gran esfuerzo mental y físico. En el segundo cuarto las diferencias fueron mínimas. Ni Obra ni Fuenla fueron capaces de abrir brecha en el luminoso. El cinco santiagués repartió mucho los puntos, ya que Corbacho no tenía opción de lucirse, y recortó cuatro de los cinco puntos de desventaja del primer acto: 40-41.

En este segundo cuarto fue Jorge Sanz el protagonista por parte de los obradoiristas, mientras que los triples de Kurz y Vega salvaron al Fuenlabrada.

Tras el descanso, la charla de Moncho Fernández no la entendieron los santiagueses, que en poco más de un minuto recibieron un parcial de 0-7. Hasta que apareció Corbacho. Hasta que el mallorquín se enfadó y frenó la carrera de los madrileños. Lo hizo con un triple. El único que convirtió de siete intentos: 43-48.

El Obra, sin embargo, salió algo despistado. Sin intensidad. Sin agresividad. Por eso, el técnico solicitó un tiempo muerto a los tres minutos de reanudarse el encuentro, tras una desventaja de nueve puntos (43-52). Una vez más se demostró que la veteranía es un grado. Junyent salió al rescate de su equipo. Con decisión, con esfuerzo y con acierto, el pívot recuperó parte del terreno perdido con seis puntos consecutivos: 51-55. Pumprla y Kendall igualaron de nuevo el partido (55-55) tras un parcial de 10-0 en menos de dos minutos. El Obra estaba vivo.

El último cuarto arrancó con mucha igualdad, pero con el Obra más enchufado que su rival. Los santiagueses firmaron de salida un parcial de 8-0 que empezó a provocar cierto nerviosismo e inseguridad en el Fuenlabrada. A Dewar no le tembló el pulso. Anotó su segundo triple y puso en serios aprietos a los madrileños a cinco minutos y medio para el final (66-60). Durante tres minutos apenas se movió el marcador. Demasiadas imprecisiones en uno y otro equipo. Incapaces de anotar. Ni Obra ni Fuenla pudieron romper el partido. Los ataques empezaron a debilitarse y a tener serios problemas a la hora de seleccionar el tiro.

Con un parcial de 0-8, el cinco madrileño fue quien dio un paso al frente (66-68) a dos minutos para acabar. Kurz golpeó de nuevo con un triple (67-71) y la afición Obra empezó a temblar. El Obra buscó desesperadamente el triple. Sin acierto. El técnico local insistió en las rotaciones para darle la vuelta al partido, pero el Fuenlabrada supo aprovechar sus posesiones y no falló en los lanzamientos. Por eso se llevó la victoria de Sar.

73 - Blusens Monbus (22+18+18+15): Rafa Freire (-), Pavel Pumprla (7), Alberto Corbacho (7), Levon Kendall (14), Salah Mejri (13) -cinco inicial-, William Buford (2), Benjamin Dewar (8), Oriol Junyent (8), Robbie Hummel (1) y Jorge Sanz (13).

79 - Mad-Corc Fuenlabrada (27+14+19+19): Leo Mainoldi (10), Saer Sené (6), Kristaps Valters (17), James Feldeine (8), Jon Cortaberría (11) -cinco inicial-, Javier Vega (3), Quino Colom (2), Sergio Sánchez (2), Rob Kurz (18) y Álvaro Muñoz (2).

Árbitros: García González, Guirao y Manuel. Eliminaron por acumulación de faltas personales a Salah Mejri y a Rafa Freire por el Obradoiro y a Kristaps Valters por el Fuenlabrada.