Evitar costosas averías, hacer que su vida útil se prolongue o mantenerlo en un buen estado para conseguir un precio favorable a la hora de la venta, es posible
15 sep 2015 . Actualizado a las 09:20 h.En estos momentos difíciles para la economía, el cuidado del automóvil se convierte en un aspecto incluso más importante. Evitar costosas averías, hacer que su vida útil se prolongue o mantenerlo en un buen estado para conseguir un buen precio a la hora de vender el coche, son buenas razones para esmerarse en el trato que damos a nuestros vehículos. En esta pequeña guía, te damos las claves para que tu coche conserve su buen aspecto y todas sus prestaciones intactas.
No te saltes ninguna revisión
Atajar un problema cuando este empieza a manifestarse es clave para evitar males mayores. Pequeños ruidos o reacciones extrañas pueden ser síntomas de un problema incipiente, por lo que resulta fundamental atajarlo cuanto antes. Una revisión anual es también una buena forma de mantener tu coche bajo vigilancia.
Los neumáticos son muy importantes
Los neumáticos juegan un papel fundamental en la estabilidad del vehículo y también en el consumo de combustible, ya que la mayor resistencia contra la carretera que presentan si están gastados hace que dicho consumo aumente . Recuerda cambiarlos antes de que su dibujo llegue a tener una profundidad inferior a 1,6 mm.
No ahorres en recambios
Una pieza en mal estado, como un filtro del aceite demasiado sucio, puede provocar un gran daño al motor. Cambia las piezas importantes cuando sea necesario.
Protege la pintura
Aparcar a la intemperie, los excrementos de los pájaros, los mosquitos y moscas que se pegan al ir a gran velocidad, son elementos que deterioran la pintura. Para mitigar el efecto de estas agresiones, una buena solución es aplicar una capa de cera dos veces al año.
Cuida las juntas de goma
El sol, la lluvia y los detergentes provocan el envejecimiento de estos elementos. Utiliza productos renovadores de goma regularmente y siempre que aparques al sol, cubre el salpicadero.
Comprueba periódicamente el nivel de aceite
El aceite es para el motor como la sangre para el cuerpo humano. Por eso resulta fundamental que nunca se encuentre por debajo del nivel mínimo y que no esté demasiado sucio. Sustitúyelo con la frecuencia adecuada y vigila su nivel con frecuencia.
¿Necesitas cambiar la correa de distribución?
Respeta siempre las indicaciones del fabricante sobre la vida útil de la correa sin apurar hasta el final los plazos para cambiarla. Si se parte, las válvulas y los pistones del motor pueden llegar a romperse.
Respeta la fase de calentamiento del motor
Al encender el motor, se necesitan unos instantes para que el aceite, que se encuentra almacenado en el cárter, pueda ascender y engrasar todo el mecanismo. Por ello, durante los primeros minutos tras el encendido, debe conducirse con suavidad y sin acelerar demasiado.
Cambia de marcha con suavidad
El embrague es una pieza que debe cuidarse, pues su sustitución resulta muy costosa. Por ello, debe pisarse con firmeza pero sin brusquedad y soltarse de la manera más fluida posible.
Mantén el limpiaparabrisas limpio
Las escobillas acumulan una gran cantidad de pequeñas piedras, polvo y suciedad en general. Si no los eliminas, rayarán la luna ocasionándote una pérdida de visibilidad.