Subaru lanzó en 1995 su primer outback, un recreacional muy capaz gracias a su avanzado sistema de tracción. Ahora llega la quinta generación de un crossover excelente, pero a la vez desconocido
06 abr 2015 . Actualizado a las 13:07 h.Por su aspecto exterior, podemos definir al Outback como un coche a medio camino entre el familiar y el crossover. Tiene la capacidad de maletero muy amplia, 559 litros y una tracción total muy sofisticada, que nos permite afrontar cualquier paso por la montaña, al más puro estilo todoterreno. Bajo el capó existe la posibilidad de elegir un motor diésel de dos litros, renovado en un noventa por ciento y con una cifra de potencia de 150 caballos. En ciclo gasolina, la cilindrada aumenta hasta 2,5 litros y ofrece 175 caballos. Ambos motores son de diseño bóxer, cilindros horizontales opuestos permitiendo centro de gravedad baje y el coche sea más estable. El nuevo Subaru Outback es mucho más atractivo, con líneas actualizadas a las exigencias del mercado combinando deportividad y elegancia y mejorando su aerodinámica un 3,4 por ciento. Su altura libre al suelo es ahora de 20 centímetros y en su frontal incorpora por primera vez su parrilla hexagonal. También los LEDS han llegado a las luces de cruce, posición y frenado. Como detalle, el pilar del parabrisas ha cambiado su inclinación, permitiendo ahora un pequeño cristal que mejora la visión del ángulo muerto y reubica la posición de los retrovisores exteriores en las puertas.
Interiormente, los materiales han mejorado al tacto y a la vista y se ha dotado de una pantalla de 7 pulgadas táctil con numerosas funciones y una conectividad propia para smartphones gracias al sistema Starlink desarrollado por la marca.
Con un precio de partida de 29.900 euros se podrá elegir entre 7 versiones y 3 niveles de acabados diferentes.
Con el Subaru Outback y sus 4,8 metros de longitud de carrocería podremos dar rienda suelta a todas nuestras necesidades, ya que el coche, con un comportamiento impecable, tanto en carretera como fuera de ella, no tiene limites. El conjunto de motor, frenos y suspensión se combinan a la perfección con un habitáculo silencioso y agradable.
A EXAMEN
SEGURIDAD
Eyesight. Este sistema de ayuda a la conducción ya se incorpora de serie en todas las versiones. Dos cámaras HD estereoscópicas ubicadas a cada lado del espejo retrovisor, vigilan todo lo que ocurre delante del coche. Su objetivo es analizar el tráfico y ayudar al conductor ante posibles despistes. La calidad de sus cámaras permite detectar vehículos, peatones, ciclistas y avisar al conductor del peligro inminente. En caso de no recibir respuesta por parte de este, el sistema puede actuar llegando a frenar el coche hasta 50 km/h. Además las cámaras permiten mantener el control de crucero adaptativo de 0 a 180 km/h así como la advertencia de desvío y salida de carril.
REPARTO DE PESOS
Tren de rodaje. Si por algo se caracteriza Subaru es por su motor bóxer y su tracción permanente a las cuatro ruedas. Dos tecnologías que le permiten presumir de un tren de rodaje simétrico repercutiendo en un reparto de pesos uniforme entre las cuatro ruedas y un bajo centro de gravedad, a pesar de ser un recreacional elevado veinte centímetros.
ESTABILIDAD Y TRACCIÓN
Active Torque Vectoring. Esta función ha sido heredada del modelo más deportivo de la marca, el WRX STI. Asociada al control de estabilidad, permite aumentar la agilidad y sobre todo el paso por curva sobre asfalto, ya que frena la rueda interior en caso de necesidad y reparte todo el par al resto de ruedas. Además, un sistema denominado XMode se ofrece para poder asistirnos en descensos de pendientes, actuando sobre tracción, motor, frenos y transmisión.