«Chega o bo tempo e o prezo da carne dispárase pola demanda»

María Cedrón REDACCIÓN / LA VOZ

MERCADOS

Ana Garcia

09 jul 2017 . Actualizado a las 09:49 h.

Cuando empieza el buen tiempo, el teléfono de José Antonio Suárez suena más que nunca. Lo hace porque no deja de recibir pedidos de las comisiones de fiestas de toda la comarca de Bergantiños. Natural de Laxe, es propietario de Distribuciones Suárez, asentada en el polígono de Ponteceso.

Es el encargado de surtir de carne para los churrascos populares que acompañan las verbenas de toda la redonda. Porque en un lugar donde todo se celebra comiendo, son pocas las parroquias donde no corra la carne, el vino y el pan. Y que no falte. La demanda durante las fiestas patronales es tal que, en el mercado en general, «chega o bo tempo e o prezo da carne dispárase». Lo que más sale -dice- «a costela de porco. A min a tenreira gústame moito, pero sae máis o porco ou o chourizo criollo». Hay que pensar que las raciones suelen costar nueve o diez euros. Normalmente incluye el vino y el pan.

¿Cómo le hacen los pedidos? Cada evento hace un cálculo y encargan. La carne la lleva en uno de sus camiones frigoríficos preparados para que el producto salte directamente de la nevera al asador. Porque no se arriesga a que el calor la vaya a estropear. «Ademais é obrigatorio que nas festas a carne estea refrixerada. Entón, a medida que marcha para a parrilla, vaise sacando máis. A que non se consume mantense perfectamente e tamén a podemos conxelar despois no caso de que sobre moita», explica.

Uno de sus clientes es José Antonio Pérez Vilariño. Es el propietario del asador Fogón da Pía, en Paiosaco (Laracha), pero también es el parrillero oficial de muchas fiestas. «Suárez pon a carne e o camión frigorífico e eu doulle a man», apunta.