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Pesqueros gallegos denuncian que hay barcos que navegan con el AIS apagado

e. abuín REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

Piden a las capitanías que actúen contra esta infracción que pone en riesgo la seguridad

23 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Es desde marzo del 2012 que todos los pesqueros de más de 15 metros de eslora -los de estas dimensiones fueron los últimos en incorporarse a la obligación- deben estar equipados con el sistema AIS o SIA, según se empleen las siglas en inglés o en español del Sistema de Identificación Automática. Es, según reza el real decreto que lo regula, un dispositivo uniforme para la flota de los Estados miembros que hace compatible «la libertad de navegación en las aguas comunitarias con la protección de la seguridad marítima y la prevención de la contaminación del medio marino».

El AIS, por así decirlo, viene a ser la evolución del radar -aunque no lo sustituye, dado que este aparato sigue siendo obligatorio-, pues aparte de mostrar la posición del barco, permite saber el nombre y los datos de la embarcación que aparece en la pantalla, así como registrar los datos de la travesía, convirtiendo esta herramienta en una especie de caja negra (sistema RDT) para facilitar las investigaciones posteriores a un accidente marítimo. 

Una información más completa y una representación gráfica de lo que hay en el entorno mejor detallada que la que arroja la pantalla del radar -por más que este aparato lo aventaje en precisión a la hora de calcular distancias y dar posición- son la causa de que los profesionales se hayan hecho fácilmente al AIS y a sus símbolos. Signos capaces de alertar si se navega en rumbo de colisión, si un barco está en apuros -y qué embarcación- o la derrota de un buque.

Claro que para algunos profesionales todo eso es proporcionar demasiados datos al competidor, información de más en opinión de un colectivo muy celoso de sus secretos profesionales y acostumbrado a guardarse para sí la situación de los caladeros más prolíficos. Y la solución por la que optan es radical: apagar el aparato. De esta manera, su eco aparece reflejado en la pantalla del radar -aunque no especifica de qué embarcación se trata-, pero no en la del AIS. 

Esa actitud, en un colectivo que ya se ha acostumbrado a trabajar más con el sistema de identificación, indigna a quienes lo llevan activo, como exige la ley. «Hai moitos que non queren que ninguén saiba onde están, se no muelle, no mar ou no bar e apagan o sinal, co que non aparecen na pantalla», apunta un armador que prefiere permanecer en el anonimato. 

Apagado día y noche

Así es que varios armadores y patrones de pesqueros gallegos han denunciado ante Salvamento y las Capitanías Marítimas el hecho de que «una serie de barcos del cerco que tienen la obligación de tener encendido el AIS, lo mantienen apagado durante todo el día y la noche, con el riesgo que esto conlleva para la navegación de las demás embarcaciones».

Los denunciantes inquieren también a las autoridades «quién sería el responsable» en el caso de que haya un siniestro con una embarcación que tiene el AIS apagado. También se preguntan si se realiza un seguimiento del uso de la herramienta o si el patrón puede prescindir de ella impunemente. Según el real decreto, no, pues los buques pesqueros equipados con un sistema SIA «lo mantendrán en funcionamiento en todo momento. Solo en circunstancias excepcionales, el citado sistema podrá ser desconectado si el capitán lo considera necesario para la seguridad del buque». Por eso, los denunciantes solicitan la intervención de las autoridades marítimas para que solucione esta anomalía.

Expedientes abiertos por un incumplimiento que está calificado como falta grave

Con el AIS no ocurre como con la caja azul, que hay un equipo en Madrid, en el Centro de Seguimiento Pesquero, que enseguida detecta si una embarcación tiene o no activo el dispositivo VMS (Vessel Monitoring System), nombre formal de la caja azul. 

 

Para que las autoridades se percaten de que un barco no lleva encendido el sistema de identificación automático tienen que percibir que hay un eco que aparece en la pantalla del radar, pero no en la del AIS. Y se han dado casos, según apuntan fuentes de las Capitanías Marítimas. De hecho, es más frecuente esta circunstancia -que un barco de inspección se percate de la anomalía- que las denuncias de armadores particulares.

Las fuentes consultadas explican que se han abierto varios expedientes por llevar el AIS apagado, aunque no fueron capaces de concretar cuántos. Como tampoco la cuantía de la sanción a la que se expone el pesquero que obvie la obligación de llevar encendido el sistema, algo que está considerado como infracción grave.

Aparte de que su uso es obligatorio para los pesqueros mayores de 15 metros de eslora, la autoridad marítima destaca el avance en materia de seguridad que supone el AIS, puesto que, a diferencia del radar, se conoce qué embarcación está en las inmediaciones y, en caso de problema o de que se encuentre en rumbo de colisión, se puede establecer contacto por VHF.

En cuanto a la responsabilidad en caso de que un barco involucrado en un suceso, las fuentes consultadas sostienen que sí sería un agravante.