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La flota de bajura gallega se embarca dividida en la costera de la xarda

e. abuín REDACCIÓN / LA VOZ

PESCA Y MARISQUEO

MARCOS CREO

A diferencia de otros años, la flota de cada provincia gestionará su propia cuota

27 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde que Madrid repartió por provincias la cuota de xarda correspondiente al caladero del Cantábrico Noroeste, la flota de bajura gallega siempre había sumado sus cupos para embarcarse en una gestión autonómica de los «escasos» kilos asignados. Era la Federación Galega de Confrarías la que fijaba reglas y llevaba el recuento de los consumos de todos los barcos que emplean artes distintas del arrastre y el cerco.

Pero este año se ha roto ese saco común. Galicia se embarcará dividida en esta costera de la xarda. Cada provincia realizará su propia singladura detrás de la caballa. Una derrota que para las flotas de A Coruña y Lugo comenzó hace justo una semana -el lunes 20- y que para la de Pontevedra arranca hoy.

El diferente calendario es consecuencia de seguir todas una ruta diferente. Porque esta vez no es la federación gallega la que marca normas comunes, sino que es cada una de las tres provinciales la que estipula las reglas que marcarán la costera para las embarcaciones que amarran en sus respectivos puertos.

Lugo, la primera en desmarcarse de la gestión común, sigue el esquema del año pasado, cuando iban todos a una. Así, se ha fijado un cupo semanal de 2.000 kilos por tripulante con un tope de 10.000 kilos, aunque se ha eliminado el porcentaje que se permitía de sobrepasamiento semanal.

De las casi 700.000 toneladas de que dispone la bajura lucense, se ha dejado para esta campaña el 80 %, mientras que el 15 % restante queda en reserva para la pesca accidental que realizan las embarcaciones que no se desplazan a otras comunidades del Cantábrico para dirigir sus anzuelos a la xarda.

Sobre un mes de campaña

Según Basilio Otero, patrón mayor de Burela y presidente de la Federación de Cofradías de Lugo, la veintena larga de barcos que participan en la costera están «pescando ben». Faenan por la costa asturiana y, según los datos, que aún no son definitivos, se ha consumido en una semana en torno al 20 % de la cuota, con lo que se está en la línea prevista de que la cantidad de xarda disponible diese para una costera de un mes de duración.

Menos optimistas son en Pontevedra, los grandes perjudicados por el desmarque de las otras dos federaciones, según el presidente provincial de los pósitos, José Antonio Gómez, que duda de que la campaña pueda prolongarse mucho más allá de una semana.

Con la flota de artes menores más numerosa y con el cupo más exiguo de las tres provincias gallegas, Gómez asume que la treintena de barcos que estaba previsto que se desplazasen al Cantábrico agotará rápidamente las escasas 300.000 toneladas, a razón de 10.000 kilos semanales, tope que continúan manteniendo.

El también patrón mayor de Portonovo es consciente de que el germen de la ruptura de la unidad estaba en su federación, con embarcaciones a las que achacaban no facilitar los datos de forma ágil -o directamente no enviarlos-, provocando así cierres precipitados y, sobre todo, que se agotase el cupo reservado para la pesca accidental. Así es que Gómez Castro ha optado por dedicar la mitad a pesca dirigida y la otra mitad a cubrir la incidental. Ahora bien, si cumplen a la hora de facilitar los consumos, el porcentaje podría elevarse a favor de la flota que realiza la costera hasta alcanzar el 70 % de las 560.000 toneladas totales.

Lugo no descarta volver a la gestión autonómica si se corrigen los incumplimientos

Que los dos millones de kilos de caballa que suman las tres provincias gallegas vuelvan a gestionarse de forma autonómica no es, para nada, imposible. La que fue la principal instigadora de la separación, la federación lucense, está dispuesta a regresar a la gestión común, que cree la mejor fórmula, pero siempre que se corrijan esos incumplimientos que han perjudicado al conjunto de la flota. Así lo asegura Basilio Otero, al que le llovieron críticas por la decisión de escindir a su federación. «Decidimos ir pola nosa conta porque había un compromiso a nivel autonómico que non cumpriron algunhas embarcacións da provincia de Pontevedra», explicó Otero. Los lucenses quieren demostrar «que se se xestiona ben se pode facer doutra maneira», sin perjudicar al resto de la flota que no va al Cantábrico y que, por la sobrepesca de los barcos que hacen pesca dirigida, se quedan sin cupo y «teñen que tirar xarda pola que poderían ter 30 ou 40 euros».

Desde luego, «nós estamos máis interesados en ir xuntos porque é máis facil, pero hai que asumir responsabilidade», aduce el también patrón mayor de Burela. Porque «o que non é lóxico é que a xente non informe de que vai participar na campaña, que non mande datos e que os mande todos xuntos ao final, cando xa pedíramos o peche da campaña». Fue lo que sucedió el año pasado, que cuando Galicia creía que estaba ya a punto de agotar la cuota, llegaron más notas de descargas que disparó el consumo y agotó incluso el 15 % que se había reservado.