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Más de 139 especies de peces de 62 familias habitan en el banco de Galicia

e. a. REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

UDO WEITZ | efe

Lo que más abundan son ejemplares del clan de los «Trachichthyidae» (como peces reloj) y los «Moridae» (como el carbonero y otros gadiformes)

10 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde que en 1964 se constató que al oeste de Touriñán había una montaña submarina que se bautizó como el banco de Galicia, esta ha dado mucho que hablar. Allí acabó sus días de singladura el Prestige. Allí está el Gran Burato, ese cráter de cuatro kilómetros que da cuenta de la presencia de hidrocarburos. Y allí hay vida. Mucha. Cuarenta años después de su descubrimiento, el investigador del CSIC Rafael Bañón ha determinado en una tesis doctoral que habitan 139 especies de peces marinos de 62 familias diferentes. Al menos son las que Bañón ha identificado tras analizar los resultados de 22 campañas de investigación, realizadas entre los años 1980 y el 2011, expediciones tanto con barcos de pesca comercial, como en buques oceanográficos.

Lo que más abundan son ejemplares del clan de los Trachichthyidae (como peces reloj) y los Moridae (como el carbonero y otros gadiformes).

La mayor parte de las especies registradas son de aguas profundas y habitualmente habitan a más de 400 metros de la superficie. Además, la mayoría, por sus características físicas, biológicas y ecológicas son consideradas como altamente vulnerables, pues tiene una longevidad elevada, crecimiento lento, baja fecundidad, madurez tardía y alta vulnerabilidad a las actividades humanas y a los cambios en el ecosistema.

La elevada biodiversidad detectada y el importante porcentaje de especies vulnerables encontradas «fai moi necesaria a protección do banco e ratifica a súa declaración como lugar de importancia comunitaria (LIC) realizada pola UE», subraya Bañón en su tesis.

No es un caladero habitual de la flota artesanal, porque está alejado de la costa, pero Bañón ha constatado que existió «certa actividade dos arrastreiros» al oeste del banco y de los palangreros en el este, pero «lonxe de afectar ao sector pesqueiro», la catalogación como LIC «será beneficiosa para a flota, xa que, ao ser lugar de exportación de biomasa, provoca a atracción de máis fauna mariña».