Más de 62.000 personas solicitaron el año pasado una licencia deportiva en la comunidad autónoma
12 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Al Parlamento Europeo no se le ha escapado que la pesca recreativa es también una actividad extractiva y, como tal, debe estar afectada por la política común de pesca (PCP). De ahí que en febrero del 2015 acordase cobijar a los deportivos bajo el paraguas de la Europa Azul. Así, con la vista puesta en las directrices comunitarias y la PCP, la Consellería do Mar trabaja en la redacción de un decreto que regulará la pesca recreativa en aguas gallegas. Una norma que abordará aspectos como las medidas de seguridad de las que deben dotarse las personas que practican esta actividad -que el año pasado fueron más de 62.000-, los sistemas de control, la relación de artes autorizadas o los límites y distancias que deben guardarse para esta práctica con respecto a otras actividades concurrentes en la zona marítima.
El anuncio lo hizo ayer el director xeral de Pesca, Juan Maneiro, en la inauguración del Taller sobre pesca recreativa en el litoral Atlántico ibérico, un encuentro que se está celebrando en Vigo y al que asisten más de medio centenar de expertos científicos, representantes de las Administraciones, usuarios, pescadores profesionales y oenegés.
Ahora bien, Maneiro advirtió de que la tramitación de ese decreto no será lo que se dice ágil. De hecho, las líneas generales de ese decreto estaban ya perfiladas en el 2010, cuando se hablaba de cuatro tipos de licencia deportiva y de la creación de un censo de embarcaciones de recreo.
El motivo del retraso está, según expuso Juan Maneiro, en la necesidad de homogeneizar las normas con otras comunidades autónomas, así como por la adaptación a los avances de la legislación comunitaria.
Sostenibilidad
Maneiro apostó en el foro por una normativa que prime la sostenibilidad de la pesca recreativa en los ámbitos social, económico y ambiental. Y eso requiere disponer de datos sobre volumen de capturas y especies extraídas, así como de un registro de embarcaciones y licencias. Según Maneiro, solo con esa información en la mano se podrá elaborar «unha normativa de pesca marítima recreativa que antepoña a sustentabilidade ambiental, económica e social ás restricións preventivas sen constatacións científicas e datos rigorosos». Todo, «en perfecta convivencia coa pesca profesional», con la que, no es secreto, han tenido los deportivos varios encontronazos.
El director xeral de Pesca señaló que es preciso «mellorar o coñecemento e seguir a actividade da pesca a nivel europeo», así como «mellorar a formación e fomentar a sensibilización sobre a xestión dos recursos». Eso contribuirá «a acadar a harmonía na explotación e o disfrute do medio, sendo misión das Administracións garantir que os distintos actores se sitúen en igualdade de condicións, dereitos e obrigas», concluyó.