Patrocinado porPatrocinado por

Mar encarga un estudio del impacto del arrastre pelágico en la pesca de bonito

e. abuín REDACCIÓN / LA VOZ

PESCA Y MARISQUEO

PEPA LOSADA

La conselleira asegura que ya llevó informes a Bruselas en contra de esta arte

29 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque afirma que son ya dos años los que la Consellería do Mar lleva insistiendo ante la Unión Europea en que el arrastre pelágico no parece el sistema más adecuado para pescar bonito, tanto por los descartes que lleva asociados como por las cantidades que captura y su contraste con las artes artesanales, Rosa Quintana prefiere que «sexan os nosos propios investigadores os que acrediten que este tipo de aparello é contraproducente para esta pesqueira ou non». Por eso ha encargado un estudio sobre el impacto del arrastre pelágico que emplean los franceses en la pesca del atún blanco.

Ese sistema, que en España está prohibido tanto para el bonito como para cualquier otra especie, ha desatado una tormenta en el Cantábrico después de que varias parejas de barcos franceses e irlandeses se apostasen al lado de los buques españoles que pescan con cacea a escasas doce millas de las costas gallegas.

La conselleira puso por delante que ella siempre prefiere decir que «non hai arte boa nin mala, senón artes mal utilizadas», por lo que, a su juicio, es imprescindible determinar técnica y científicamente si «o arrastre peláxico ten que modificar a súa forma de actuación». E instó al sector a ser puntilloso, pues recordó que también el arrastre de fondo está en entredicho y desde Galicia siempre se defiende que bien empleado y regulado puede ser tan sostenible o respetuoso como cualquier otro.

Prohibido en España

Ahora bien, Quintana dejó escapar que «se o Estado español non ten autorizado o arrastre peláxico é porque non o considera unha boa arte, pero de aí a poder acreditar máis cousas media un treito e haberá que analizalas e estudalas antes».

También puso el acento en el hecho de que es cierto que no está autorizado para la flota española, pero no lo es menos que Francia sí lo permite y que, por tanto, los barcos estaban trabajando con un arte legal y en aguas comunitarias. «Aí nós non temos nada que dicir, porque tamén a nosa flota faena con todo o dereito do mundo en augas próximas a Francia, Reino Unido ou Irlanda», razonó. Otra cosa es que estos buques que se dedican al arrastre pelágico deban cumplir las normas y, si no lo hacen, «teñen que ser sancionados porque crean competencia desleal coa inmensa maioría dos que se adican a esta actividade económica».

Mayor presión inspectora

En este sentido, la conselleira explicó que, desde Mar, se pidió un incremento de las inspecciones por parte del ministerio, para garantizar que «todos seguían as mesmas regras de xogo». Así se hizo «e así se logrou acreditar que algúns barcos estaban incumprindo as normas do seu propio Estado e as da UE».

Quintana dice que el recuento exprés determinó que no se había agotado todo el cupo

La conselleira de Mar rompió ayer una lanza en favor del Ministerio de Agricultura dada la premura con la que realizó el recuento de los datos de captura de la flota. Una celeridad que, por otra parte, fue reclamada desde Galicia: «Cando o luns nos comunicaron, ao mesmo tempo que ao sector, que se ía pechar a pesqueira, pedímoslle á Secretaría General de Pesca a máxima axilidade no reconto, porque había flota que estaba fóra e que viña a facer combustible e víveres ao porto o domingo e, por tanto, non parecía xusto que tivera que vir a terra para logo volver saír».

Quintana aseguró que ese requerimiento fue atendido, porque el recuento se hizo rápidamente. Es más, aseguró que todavía quedaban toneladas de la cuota del 2016 pendientes de pescar, a pesar de que Agricultura dio a entender anteayer en un comunicado que el cierre no había llegado a hacerse efectivo porque se había aplicado el mecanismo de flexibilidad que permite adelantar a este ejercicio hasta el 10 % de la cuota del año que viene.

Eso dio pie al Principado de Asturias a pedir una mejor gestión de los datos de la costera del bonito y a exigir «que no vuelva a producirse», aseguró la consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez. Y añadió que prefiere no pensar que el agotamiento de la cuota tenga nada que ver con las elecciones del pasado domingo en Galicia y el País Vasco.