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La sardina alcanzó los 12 euros el kilo en la plaza en la víspera de San Xoán

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

PESCA Y MARISQUEO

José Manuel Casal

Se encuentran a precios asequibles ejemplares de tamaño mediano o descongelados

23 jun 2016 . Actualizado a las 16:33 h.

Solo los gallegos y sus parientes portugueses son capaces de seguir tirando la casa por la ventana para celebrar San Xoán y abrir la cartera de par en par para extender sardinas sobre la parrilla. Por eso que toda la que se está desembarcando estos días -que no es mucha en comparación con otros años- no traspasa la frontera por Pedrafita aunque sí cruza la Raia del Miño para satisfacer la novena que los lusos dedican a San Antonio, que se festeja a lo grande el 13 de junio, pero en los días posteriores sigue habiendo avidez de sardina. Lo dice Pedro Corredoira, exportador coruñés que hoy festejará con tortilla, empanada y churrasco la noche más larga del año. Y no es cuestión de precio -que también-, sino de calidad. «La sardina aún no tiene grasa, aún no chorrea en la parrilla», dice. Por eso es mejor esperar un par de meses.

Por suerte para los cerqueros, no todos siguen el ejemplo de Corredoira. Así es que en la coruñesa plaza de Lugo se vendía el kilo de la sardina grande a 12 euros. Y los clientes la compraban: «La gente es muy precavida y prefiere no esperar al último día para asegurarse la mercancía», contaba ayer una pescantina coruñesa.

La de mayor tamaño también se vendía cara ayer en el mercado de abastos de Ribeira. A 9 euros la de tamaño grande. Los clientes no se peleaban porque no había muchos. El mercadillo en A Pobra restó afluencia a los puestos de pescado ribeirenses, pero alguna se despachó. También está obteniendo buena cotización y demanda la xouba de Rianxo, por la que las pescantinas pedían 7 euros. En Vigo y A Mariña, se vendía la sardina grande a 10 euros.

De todos modos, si no se es demasiado exquisito ni exigente con el tamaño, hay posibilidades de llevarse esta noche sardina a la parrilla sin dejarse el presupuesto de la compra del resto de la semana. El medianillo, como se denomina a esa talla que hay que reunir entre 12 y 14 piezas para hacer un kilo, se vendía en A Mariña 4 euros el kilo, entre 5 y 6 en Ribeira y también a 4 en A Coruña. Es más, había pescaderías herculinas que lo ofrecían a 1,75 euros.

Información elaborada por E. Mouzo, A. Gerpe, S. Serantes, S. Antón y E. Abuín. 

En la lonja de Vigo la caja más cara se paró en los 115 euros y la más barata en los 90

Si el martes los cerqueros arribaron contentos al puerto de A Coruña porque por fin habían dado con sardina, ayer las caras ya eran más largas. Los más de 60 barcos de toda Galicia y alguno de Avilés que optaron por la lonja herculina para vender sus capturas apenas consiguieron poner a la venta en el Muro 350 cajas de sardina grande. Unos 5.000 kilos que se pagaron, eso sí, a un máximo de 90 euros la caja de 15 kilos (6,50 euros el kilo), una cotización considerable si se tiene en cuenta que todavía faltaban 48 horas para encender las hogueras, recordaba un cerquero de Portosín. Con todo, fueron muy pocas cajas las que se pararon a ese precio. Las pujas fueron bajando hasta quedar en los 48 euros (poco más de tres euros el kilo). El medianillo fue ya por los suelos: entre 8 y 10 euros los 15 kilos (0,57 y 0,71 el kilo).

Aparece en Portosín

Entre 80 y 90 euros se pagó también en Portosín la sardina grande. Pero para buena cotización, Vigo. Esos 90 euros fue el mínimo que se ofreció por el envase de ejemplares grandes, de esos en los que el kilo lleva entre 9 y 12. La puja máxima fue de 115 euros (7,7 euros el kilo).

En A Mariña también escasea la sardina que se demanda para San Juan. La poca que hubo se pagó a 7 euros. En la lonja de Celeiro se rularon un total de 16 toneladas de la especie, que se vendió a un precio medio de 1,60 euros. También se ruló sardina en Burela, donde las cotizaciones se situaron entre 0,55 y 1,70 euros el kilo.

3.000 kilos para el banco de alimentos

Puede que la sardina no llegue a las plazas, pero sí habrá en el Banco de Alimentos de Galicia, en el puerto pesquero de A Coruña. Allí es donde se han enviado los 3.000 kilos de sardina que fueron decomisadas por una patrulla del Seprona de la Guardia Civil de Corcubión en un control rutinario en el puerto de Camariñas. Al dar el alto a un camión isotermo que se dirigía a Vimianzo encontraron mercancía sin documentación.