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La Comisión del Atún del Índico recorta la cuota de rabil, pero solo para el cerco

la voz

SOMOS MAR

La organización regional de pesca ha aprobado un recorte del 15 % de las capturas del atún de aleta amarilla y una rebaja del 23 % en el número de objetos para la flota cerquera

03 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La Asociación Nacional de Armadores de Buques Atuneros (Anabac) ha aplaudido los esfuerzos de las partes contratantes de la Comisión del Atún para el Océano Índico (IOTC) en la cumbre que acaba de concluir en la isla de Reunión para tratar de recuperar los stock de rabil (Thunnus albacares), también conocido como yellowfin (atún de aleta amarilla). La organización regional de pesca ha aprobado un recorte del 15 % de las capturas de esta especie -que se suma al otro 15 % que se acordó en el 2015- y una rebaja del 23 % en el número de objetos (FAD, dispositivos de agregación de peces) para la flota cerquera. Además, ha decidido limitar el número de buques auxiliares.

Las medidas acordadas siguen la línea marcada por el comité científico de la IOTC, que aconsejaba reducir un 20 % el esfuerzo pesquero. Ahora bien, Anabac reprocha que todas esas medidas tengan un único destinatario, como es la flota de cerco, y no se hayan aprobado acciones similares para otras flotas que también capturan rabil, como la del enmalle, el palangre o, incluso, las artesanales.

Juan Pablo Rodríguez-Sahagún, gerente de Anabac, señaló que los atuneros están «comprometidos con las acciones para recuperar el rabil en el Índico, pero entendemos que no establecer limitaciones similares a otras flotas, que capturan esta especie en mayor medida, no solo resulta injusto, sino que supone un riesgo importante de ralentizar el retorno del rabil a un estado de rendimiento máximo sostenible».

Lucha contra la pesca IUU

Otro motivo de satisfacción para los atuneros de Anabac es la adopción por la IOTC del Acuerdo sobre Medidas del Estado del Puerto para prevenir, detener y eliminar la pesca IUU (ilegal, no declarada y no documentada), aunque considera que se ha perdido una buena oportunidad de avanzar más en esa lucha al no prohibir los transbordos en alta mar a la flota de palangre asiática, como proponía la UE y ya es obligatorio para la flota de cerco.

Aplaude también que la IOTC haya asumido la propuesta de la UE de sancionar los incumplimiento de la obligación de suministrar datos.