Más de 200 mariscadores faenan a diario en una ría muy rica desde el punto de vista marisquero, pero con altos niveles de contaminación
23 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Los mariscadores de las cofradías de Ferrol, Barallobre (Fene) y Mugardos son los que explotan actualmente los bancos marisqueros de la ría de Ferrol. Suman entre los tres pósitos más de 200 trabajadores que faenan a diario en una ría muy rica desde el punto de vista marisquero, pero con altos niveles de contaminación por la falta de una red de saneamiento integral.
Bancos marisqueros
Altos niveles de contaminación. El banco de As Pías es uno de los más productivos de Galicia en almeja: la lonja de Ferrol lidera la subasta de ese bivalvo en la comunidad. Debido a los niveles de contaminación, el área está dividida en varias zonas según la época del año. Actualmente es B el tramo del banco en dirección a O Couto (Narón) y C la parte más próxima a Ferrol. Los socios de las cofradías confiaban en que en mayo se pudiese abrir esta última parte, pero las últimas informaciones que Mar dio a los mariscadores es que el próximo mes solo se pasaría a zona B una pequeña superficie próxima a la antigua Astano, teniendo que esperar al verano para la apertura de la otra parte de As Pías. La conversión de las zonas C en B depende de continuas analíticas que realiza la Xunta.
As Pías
Un banco en la UCI. Hace cerca de mes y medio, los patrones mayores de Ferrol y Barallobre, Isabel Maroño y Carlos Rey, respectivamente, dieron la voz de alarma sobre el mal estado de As Pías. Denunciaron que se estaba esquilmando uno de los productos estrella de la ría, al estar tantos mariscadores trabajando en una superficie del banco tan pequeña. Pidieron a la consellería que autorizase trabajos de regeneración y limpieza que permitiese un parón extractivo de As Pías. La Xunta no contestó e iniciaron en Semana Santa una serie de protestas, que preveían retomar en próximos días.
Las bateas
La alternativa que no convence al sector. Hace unos tres años la Xunta puso en marcha en la ría de Ferrol el sistema de las bateas depuradoras como alternativa con la que poder dar salida a la almeja con altos niveles de toxicidad. Este sistema consiste en llevar bivalvo de las zonas C a las bateas para que se depure durante unas dos semanas. Sin embargo, el mecanismo no acaba de convencer al sector. ¿Por qué? Por un lado, porque deben asumir las pérdidas cuando no se supera el 10 % de mortandad del producto, y por el otro, porque los precios de venta de la almeja de batea es inferior a la de lonja, además de los perjuicios derivados de que tardan quince días en tener ingresos.
Saneamiento
Una red que no funciona. La contaminación de la ría solo empezará a remitir cuando se ponga en marcha el saneamiento integral de la misma, un proceso que se encuentra estancado debido a las grietas y otras deficiencias detectadas en la depuradora de cabo Prioriño, que lleva seis años finalizada, y que solo funcionó de forma parcial.