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Incautadas en Vigo 59 toneladas de tiburones con las aletas cortadas

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

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El cercenamiento de la extremidad está prohibido por la normativa europea

20 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La patrulla del Seprona de la Guardia Civil ha decomisado en Vigo 59 toneladas de tiburones capturados en aguas de Nueva Zelanda que tenían las aletas cortadas y que iban a ser comercializados en el mercado asiático. Los ejemplares fueron capturados por el pesquero Ártico, de bandera portuguesa, y enviados en contenedores frigoríficos en un buque de mercancías hasta el puerto del Berbés.

El cercenamiento total de las aletas de tiburones está prohibido por la normativa europea para prevenir la picaresca en la comercialización de este producto. La ley permite un corte parcial de las aletas para un mejor aprovechamiento del espacio en los buques. Pero no se autoriza a separar la extremidad, pues puede dar pie a la práctica comprobada de tirar al mar cuerpos grandes y asignar sus aletas, de mayor valor, a ejemplares de menor tamaño, pudiendo así aumentar el número de capturas.

Para evitar esta sobreexplotación ilegal, el reglamento de la Unión Europea prohíbe el cercenamiento completo de las aletas de tiburón. Esta operación solo se puede llevar a cabo una vez que la mercancía ha sido descargada en tierra. Los agentes de la patrulla del Seprona de Vigo pudieron comprobar que la normativa no se cumplió en este caso. Los contenedores investigados transportaban 190 toneladas de pescado, entre los que se descubrieron las 59 toneladas de tiburones de especies conocidas comúnmente como marrajo y tintorera. Los agentes contabilizaron más de 4,5 toneladas de aletas seccionadas. Estaban adosadas con plástico de embalar a los cuerpos mutilados, que a su vez habían sido introducidos en sacos de tela, no pudiéndose acreditar si dichas aletas se correspondían con los cuerpos a los que estaban anexadas.

La Guardia Civil interpuso denuncias ante el Ministerio de Agricultura y Aduanas, mientras que el pescado quedó a disposición de la autoridad competente. Esta operación es producto de una investigación llevada a cabo durante los últimos meses por los agentes de la patrulla del Seprona, que con anterioridad ha desarrollado otras intervenciones de calado, como la detención de siete personas vinculadas al comercio de marisco no apto para consumo humano, el decomiso de 21 toneladas de bocarte pescado ilegalmente, o la intervención de un secadero ilegal de bacalao en malas condiciones.