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El sector pesquero cree «letales» las normas europeas que lo regulan

Salvador Serantes VIVEIRO / LA VOZ

SOMOS MAR

Denuncia desde Expomar en Burela un «galimatías para expertos en leyes»

15 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Como una «mosca atrapada en una tela de araña». Así dice sentirse el sector pesquero gallego ante la «saturación de normas» que regulan su actividad, un «galimatías en el que hay que ser experto en leyes para poder pescar». De la UE emanan «reglas muy complejas, y a veces contradictorias», que colocan a la flota «en un túnel» que para Galicia supone un «impacto socioeconómico y demográfico muy negativo». Para Edelmiro Ulloa, secretario técnico de Armadores de Vigo (Arvi), las normativas comunitarias están resultando «letales» para la pesca gallega y española. Opiniones compartidas por la inmensa mayoría de profesionales de la pesca, Ulloa las expuso ayer por la tarde, en Burela, en la primera de las dos Xornadas Técnicas Expomar.

En paralelo a la feria náutico-pesquera Expomar, inaugurada ayer, ese foro de debate de reflexión comenzó con un análisis de la repercusión de las decisiones políticas en la gestión de la pesca. Ulloa puso voz a la opinión de un sector «que sufre en carne propia normas muy beneficiosas para las flotas de algunos estados de la UE, los que no pescan, y para países terceros, pero no para Galicia, ni España».

«Vecinos mal avenidos»

Ulloa compara la UE de los 28 con un «patio de vecinos mal avenidos», donde el Parlamento Europeo es una junta vecinal en la que cada uno va a lo suyo y donde la Comisión «es el administrador de fincas a quien le importa un bledo la realidad que viven los vecinos».

De ahí, añade Ulloa, la «fuerte inseguridad empresarial» en la pesca, sometida a «insufribles y continuos cambios de normas». Consecuencia inmediata está siendo la «pérdida de mercados y la muy grave dependencia de países terceros para garantizar el abastecimiento» de productos del mar. Mientras la flota española tiende a desaparecer, reprocha que la UE «potencie a competidores» de países terceros. Todo con la connivencia de Estados comunitarios «que no pescan, pero que se están dando cuenta del negocio perfecto» del nicho de mercado que queda, porque las capturas de la flota europea cubren cada vez menos porcentaje de la demanda interna de los grandes consumidores de pescado, como Portugal y España.

Como aspectos positivos de la política pesquera europea, el secretario técnico de Arvi reconoce la recuperación de recursos que estaban en situación delicada, la mejora de la imagen internacional de la flota europea y la ampliación de los mercados intracomunitarios. Ante una realidad compartida por la mayoría del sector pesquero español, queda «buscar salidas al túnel».

Hermida no ve marcha atrás en la prohibición de los descartes

Andrés Hermida, secretario general de Pesca, participó activamente ayer en Expomar. Pasado el mediodía asistió a la inauguración de una feria que reúne a más de 100 expositores que presentan productos de más de 300 firmas comerciales. Y por la tarde, además de formar parte de la comitiva oficial que inauguró las Xornadas Técnicas, intervino como ponente. Centró parte de su alocución en el programa que prevé el fin de los descartes en el 2019. No hay marcha atrás, recalca Andrés Hermida, de ahí que juzgue «imprescindible un trabajo conjunto de la Administración y el sector, para estar preparados y organizados y que no nos pille a contrapié». El secretario español de Pesca reconoce como «controvertida» la obligación de desembarcar todas las capturas de especies sometidas a topes o cuotas. No obstante, opina que cabe la posibilidad de que «tenga éxito si se aplica con la máxima flexibilidad». En cualquier caso, «no puede suponer un sobrecoste» para la flota ni imponer «una selectividad» en las capturas que no esté al alcance de los pescadores.

Flexibilidades

Andrés Hermida considera que la flota española que se dirige a la merluza no tendrá «excesivos problemas» con el fin de los descartes, aunque sí con la obligación de desembarcar el jurel y bacaladilla que pesca en Gran Sol cuando va a por otras especies.

El secretario español de Pesca aplaudió la decisión de aplazar dos años las sanciones graves por incumplir la prohibición de descartes, que no haya que separar ejemplares que no alcancen la talla mínima, que la flota artesanal no tenga que registrar especies de las que no capture más de 50 kilos y que puedan descartarse piezas dañadas por predadores.

Resaltan la influencia de la sociedad en la decisión política

Javier Pereiro, biólogo y consejero del Instituto Español de Oceanografía, fue el tercer ponente invitado a las Xornadas Técnicas Expomar, que rematan esta tarde. En una propuesta bien recibida por los asistentes al foro, aboga por «tener muy presente la opinión del ciudadano, de la sociedad», por su influencia en las decisiones políticas sobre la gestión de los recursos pesqueros. La famosa triple hélice de sector, administración y científicos ha de ser cuádruple para contar con la opinión pública.