Madrid traslada a la flota que el barco estaba investigando en el caladero
07 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Un superarrastrero pelágico de bandera inglesa soliviantó en las últimas horas a la flota española que captura verdel frente al País Vasco. Comprobado que navegaba a la velocidad habitual para faenar al arrastre y en el mismo caladero donde las embarcaciones nacionales pescaban xarda, los patrones españoles empezaron a intercomunicarse, preguntándose por la presencia del buque inglés. Ayer, desde alta mar, contaban que lo habían denunciado a la Secretaría General de Pesca. A medida que pasaba el tiempo, y ante la falta de respuesta por parte de las autoridades nacionales, los ánimos se fueron caldeando. Rondaban las tres de la tarde cuando «desde Madrid nos contestaron que ese barco, el Altaire, está en una investigación, una prospección sobre la puesta de huevas de verdel», explicaba un patrón que pidió preservar públicamente su identidad.
Pasadas las cuatro, el Altaire salía del caladero donde tanto revuelo había armado. A última hora de la tarde, navegaba rumbo noroeste, a más de 11 millas de velocidad, de acuerdo con las informaciones facilitadas por pescadores españoles.
La explicación oficial no parece haber satisfecho demasiado a los patrones, que ayer relataron a este diario la denuncia y la contestación recibida. Al menos públicamente, no ponen en duda que sea cierto. Sí se preguntan por qué tardaron en obtener la información que demandaron durante horas. Saltaron las alarmas cuando comprobaron que el superarrastrero de bandera británica navegaba a velocidad de pesca, en un área «a diez millas al norte de Guetaria». O sea, por dentro de las doce millas territoriales españolas, donde está expresamente prohibido el arrastre pelágico. Más tarde lo detectaron «a veinte millas al norte de Pasajes», supuestamente también con las redes en el mar.
Según el relato de patrones de pesqueros españoles, sus primeras llamadas a las autoridades nacionales obtuvieron como contestación que trasladaban la denuncia a la Guardia Civil, cuyo servicio marítimo tendría competencias cuando el Altaire estaba en las 12 millas territoriales.
Artesanal frente a industrial
La airada reacción de la flota española por la presencia del superarrastrero tiene como precedentes el temor a que esas embarcaciones continúen introduciéndose en el golfo de Vizcaya. Con 73 metros de eslora, emplean redes de grandes dimensiones con una extraordinaria capacidad de captura. Arrastran los aparejos entre aguas, cerca de la superficie, y se estima que cada día pueden pescar y procesar unas 150 toneladas de productos marinos. En otra pesquería estacional, la costera del bonito, cada verano se repiten las quejas de la flota artesanal española contra esos buques industriales.
El verdel se está cotizando en lonjas vascas a menos de 50 céntimos el kilo
Buenas capturas, aunque menos que el año pasado, pero precios que se quedan en la mitad de los del inicio de la costera de la xarda del 2014. A menos de 50 céntimos el kilo se está pagando estos días en lonjas como Santoña, Bermeo, Pasajes o Guetaria, de acuerdo con las informaciones difundidas por diferentes medios de comunicación cántabros y vascos.
Ayer mismo, de tanta xarda como se desembarcó en Santoña, optaron por no admitir todas las capturas que la flota quería vender. Al menos eso explicaba uno de los patrones que narraron la denuncia contra el superarrastrero pelágico. El año pasado, durante prácticamente toda la costera, en Cantabria y el País Vasco la media por kilo de verdel durante la campaña rondó los 70 céntimos.
Sin precio de retirada
Cuando el pescado cotiza en lonja por debajo de los mínimos que cada año establece la Unión Europea, las organizaciones de productores tienen opción de retirarlo del mercado, congelarlo y ponerlo a la venta más tarde. De momento, no ha sido marcada la tarifa de intervención para el verdel, la que permitiría a la flota asegurarse unos ingresos mínimos cuando los del mercado no cubren siquiera gastos.
Como en el resto del Cantábrico, en Galicia la xarda está apareciendo este año más tarde de lo habitual. De hecho, las descargas de los arrastreros de litoral y de los cerqueros han sido durante los últimos poco más que testimoniales.