Nuevos intentos de robo a personas mayores de Vilalba en pleno día

Xosé María Palacios Muruais
xosé maría palacios VILALBA / LA VOZ

VILALBA

Una mujer fue asaltada en el casco urbano frente a su casa, en Plácido Peña

26 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los intentos de robo en pleno día a personas mayores de Vilalba se suceden. El caso más reciente, que se quedó en un intento sin botín final por la resistencia de la persona asaltada, tuvo lugar anteayer, a primeras horas de la tarde, en la Rúa Plácido Peña. En esa misma calle, unos días antes, a un hombre de avanzada edad se le intentó robar un reloj, aunque la operación también se vio frustrada por el sistema de cierre que lleva.

El intento de robo cometido anteayer, por otro lado, tenía como víctima a una mujer que ya había sido abordada por los asaltantes otras dos veces. Son tres personas, dos hombres y una mujer de mediana edad, que se desplazan en un coche de color oscuro. En las dos ocasiones anteriores, a la mujer le hicieron varias preguntas sobre cómo orientarse por el casco urbano vilalbés, pero ella no les hizo caso ni les contestó.

Anteayer, prácticamente frente a su casa, una mujer se acercó a ella e intentó arrancarle varias cadenas de oro que llevaba consigo. La mujer opuso resistencia, forcejeó con la asaltante, e incluso se defendió con una barra de pan que había comprado. Con esa reacción consiguió frustrar el robo y poner en fuga a los asaltantes.

Las cadenas se rompieron a consecuencia del forcejeo, aunque parece posible repararlas, por lo que en un primer momento pareció que el robo se había consumado. Sin embargo, no fue así, y las piezas quedaron entre las ropas de la mujer, que sufrió algunas lesiones en el cuello debido precisamente a ese forcejeo. La mujer que sufrió el intento de robo estaba casi frente a su casa, al otro lado de la acera. Varias veces al día realiza esa operación de cruzar la acera -en la zona inferior de Plácido Peña, cerca del cruce con la Rúa do Cotarón-, pues frente a su domicilio vive familia suya.

En días pasados, en la misma calle pero un poco más hacia arriba, un hombre mayor sufrió el intento de robo de un reloj de oro. Gritó, y logró poner en fuga a los asaltantes, aunque tenía a su favor además los mecanismos del reloj: parece que cuenta con un doble sistema de cierre, con lo que la sustracción ya se hace más complicada.

En cualquier caso, sí está más que comprobado que esa zona de Vilalba y sus cercanías son objeto de robos y de intentos de robo en los últimos tiempos. El mes pasado, a un vecino de la capital chairega le robaron el reloj, también en pleno día mientras paseaba por la antigua carretera de Ferrol (LU-118), a pocos centenares de metros de distancia de donde ocurrió anteayer el intento de robo.

Además, a una casa de la parroquia de Mourence, próxima a la rotonda de Grandisca y habitada únicamente por una persona mayor, se dirigieron en los últimos meses, unas cuatro o cinco veces, varias personas que preguntan por el médico o por el hospital. No llegaron a robar nada, aunque sí, en una de las veces, llegaron hasta el corral contiguo a la casa. Sí se robó en esa parroquia, este mes, una cadena de oro, perteneciente a un hijo ya fallecido, a una mujer.